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Hoy, por primera vez, el Diario La República se imprimió en un papel proveniente de la caña de azúcar, que fue fabricado con bagazo. una apuesta que se suma al uso de tinta fabricada con derivados de la soya
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Sociedades como Golden Marks se dedican a fabricar y comercializar productos biodegradables y amigables con el medio ambiente
Si bien el bagazo de caña hace parte de los productos estrellas de Carvajal, otras compañías emplean este residuo del proceso de fabricación de azúcar para diversos productos y sus operaciones. Uno de los principales insumos que suelen producirse con dicha materia prima son los empaques para comida que, usualmente, son hechos a base de icopor.
Sociedades como Golden Marks se dedican a fabricar y comercializar productos biodegradables y amigables con el medio ambiente a base de bagazo de caña de azúcar. Estos van dirigidos al sector de alimentos y cualquier negocio que requieran productos como envases y empaques a través de la marca Amza Empaques. A esta se suman empresas como Sunflex, Papel y Color, y RGL, cuyos nombres se han destacado en la Bolsa de Valores de Chicago, plataforma donde se comercializan, especialmente, materias primas como el trigo y maíz.
En la otra orilla están las empresas que han decidido alentar su uso. Una de las primeras en apostarle a esta innovación fue la sociedad sueca Svenska Cellulosa Aktiebolaget (SCA), dedicada a bienes de consumo y pulpa y papel manufacturado con sede en Estocolmo. Sus principales productos incluyen elementos de cuidado personal, papel, paquetería, papel de publicación, productos de madera y biodiésel de origen forestal.
A esta se ha sumado la reconocida cadena de comida, Frisby, que desde 2015 utiliza empaques biodegradables y hecho a base de dicho material en todos sus restaurantes gracias a que, entre sus características destacan los elementos renovables, resistentes al calor y sin riesgo para quien consume estos productos, facilitando la reducción. Incluso, al igual que este diario, otros medios de comunicación como El Espectador, le han apostado a imprimir sus ediciones en dicho material.
Este producto también ha incidido en otros sectores productivos del país. Según la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), la participación de la caña de azúcar en la seguridad energética se ha hecho cada vez más evidente gracias a que, con los proyectos que se están estructurando actualmente, la capacidad de cogeneración se podría incrementar 29%, lo que quiere decir que los excedentes de energía para entregar a la red nacional se incrementarían en 53%.
Hoy, la agroindustria de la caña produce entre seis y siete millones de toneladas de bagazo anualmente, volumen del cual entre cinco y seis millones se destinan a la cogeneración de energía, mientras que el monto restante es captado para la producción de papel y cartón. De hecho, según la Cámara de la Industria de Pulpa, Papel y Cartón de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), el bagazo de caña representa 12,2% de la materia prima para esta actividad, precedido por la fibra reciclada que se obtiene de residuos de papel después de su uso (60,8%), y la fibra de madera de plantaciones forestales certificadas en manejo responsable (26,7%).
Otros usos que comienza a tener este material se centran en compostajes agrícolas.
Hoy, por primera vez en su historia, La República imprimió su edición con bagazo de caña en el marco del Día Mundial del Medio Ambiente
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