¿Y qué hay del Río Bogotá?

Líder de Desarrollo Sostenible en Decathlon Colombia

Unas 270 toneladas de material dañino y basura van a parar al Río Bogotá cada mes, cantidad que no solo ha empeorado su estado, sino que también ha llevado a que el Ministerio de Vivienda, a través de una de sus más recientes publicaciones, lo catalogue como una de las cuencas hídricas más críticas en el país en temas de contaminación, junto al Río Chicamocha, Río Medellín, Río Cauca y Río Suarez.

De allí que, cuando se trae a colación el tema, a la mente de los ciudadanos solo venga un pensamiento: mal olor y agua sucia. Y no es para menos, si los titulares de las noticias, los comentarios y las fotografías así lo han reflejado.

Sin embargo, aunque gran parte del Río sigue en mal estado, ya son varios tramos los que se han logrado rehabilitar para que, desde ya, los ciudadanos tengan más zonas verdes y puedan hacer de este espacio un terreno de juego.

Pero, la pregunta es: ¿cómo se ha logrado esto y qué viene para el tan famoso Río Bogotá? La respuesta, aunque sencilla, requiere de alianzas, planes estratégicos y compromiso. Tanto de las entidades públicas y privadas, como de la población.

Por eso es que la CAR, propendiendo por un espacio natural sano y rehabilitado, desde el año pasado ha puesto en marcha el proyecto de aumento de cobertura vegetal, que tiene como principal objetivo, a través de alianzas estratégicas, consolidar un territorio ambientalmente sostenible y arborizar la zona, evitando de esta manera desbordamientos y favoreciendo la polinización.

En esto, ya son varias las empresas que han sumado sus esfuerzos y le han apostado a este proyecto que, en unos años, traerá más vida a un terreno tan olvidado y estigmatizado. Este es el caso de Decathlon, una compañía dedicada al diseño y distribución de artículos deportivos, así como a la contribución con el cuidado del medio ambiente.

Por este motivo es que, con el propósito de seguir sumando, DECATHLON donó y sembró 200 árboles en las orillas del Río Bogotá. Entre las especies que fueron sembradas se encuentran: Alcaparro, Chicala, Ciro y Mangle de tierra fría.

Cada una de estas especies, aunque poco conocidas para muchos, son fundamentales para traer polinización y seguir atrayendo a más seres vivos que hagan de este un ecosistema viable para vivir.

Por eso, hoy la invitación es a que veamos a nuestras organizaciones como una entidad capaz de seguir generando cambios. No solo generar dinero y crear servicios, sino de aportar para el futuro: un futuro en donde quepan todos.

Un futuro sostenible y consciente de lo importante que es, al final, cuidar nuestro verdadero terreno de juego: el planeta tierra. Sé que no siempre es fácil, sé que a veces nos cuesta, en medio del afán, pensar como héroes, pero dicen coloquialmente que siempre tenemos tiempo para lo que nos importa. Y, espero de todo corazón, que entre nuestras listas de prioridades esté este mundo, este país y cada una de nuestras ciudades.