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El año pasado no solo fue positivo para el sector de la construcción, sino histórico, algo que ya se proyecta se repetirá en 2022
El presidente de Asobancaria, Hernando José Gómez, quien participó en un foro sobre el tema, destacó la utilidad de la iniciativa
Con la participación del Ministerio de Vivienda, Ciudad y Territorio, el Departamento Nacional de Planeación, Asobancaria, el Centro Nacional de Consultoría y la profesora e investigadora de la Universidad de los Andes, María López Uribe, el gremio Camacol realizó el foro ‘Impacto Social y Económico de Mi Casa Ya’, en el que se presentaron los principales resultados que ha tenido el programa y su importancia en la política de social de Colombia.
Para la presidenta de Camacol, Sandra Forero Ramírez, “la política de vivienda soportada en un programa como Mi Casa Ya ha transformado la escala del mercado de vivienda social en el país”. Y agregó: “La Vivienda de Interés Social es hoy gracias a Mi Casa Ya, un hecho regional, en el que ciudades intermedias han multiplicado su importancia por cuatro”.
Los resultados entregados por López Uribe, de la Universidad de los Andes, mostraron que el programa de Mi Casa Ya tiene efectos positivos en muchas dimensiones, pues en la iniciativa se mejora la proximidad y acceso al tejido económico y social de las ciudades: transporte, zonas verdes, conectividad digital y zonas comerciales, avances para construir tejido social desde la vivienda formal.
“En este momento, Mi Casa Ya se posicionó como el programa líder en la adquisición de vivienda haciendo presencia en 309 municipios del país entre 2017 y febrero de 2021” aseguró López.
De igual forma, dentro de los hallazgos de la evaluación de impacto del programa se mencionó que los beneficiarios de Mi Casa Ya tienen una menor probabilidad de estar en déficit cuantitativo (-45,90%), menor cohabitación (-56,70%) y menor hacinamiento no mitigable (-37,08%). Se destacó que el programa es un valioso instrumento de superación de la pobreza, debido a que los propietarios tienen 73,74% más de probabilidad de estar fuera la pobreza y la vulnerabilidad.
Pero los resultados positivos no paran ahí. El estudio también concluyó que Mi Casa Ya produce mayor equidad de género y más seguridad para las mujeres. De acuerdo con el informe, las mujeres beneficiarias del programa han reportado menores percepciones de peligro y ya no son víctimas de situaciones de acoso físico y verbal en su entorno y vivienda.
También genera más acceso al mercado laboral y mayores ingresos laborales, en tanto los beneficiarios de Mi Casa Ya tienen una mayor probabilidad de trabajar y mejorar sus ingresos laborales, especialmente los hogares del segmento entre dos y cuatro Salario mínimo legal mensual vigente (smmlv).
Desde Asobancaria destacaron la continuidad del programa
La directora del Departamento Nacional de Planeación, Alejandra Botero, destacó que “el sector vivienda cuenta con evidencia sobre sus políticas públicas. Cerca de 15 evaluaciones en 10 años ratifican el compromiso por garantizar la efectividad de las decisiones del sector”. Asimismo, para Hernando José Gómez, presidente de Asobancaria, “el éxito de Mi Casa Ya es una historia de aprendizaje que se basa en la coordinación entre el sector público, privado y el sector financiero”. Además, afirma que en la ejecución se ha visto el éxito de la continuidad.
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