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Los micro gastos pueden representar, en escenarios conservadores, entre 1% y 5% de los ingresos totales para una persona
Las pequeñas compras del día a día son una fuga financiera que termina por impactar la capacidad de ahorro o la disponibilidad de recursos para cubrir otras necesidades. Sin embargo, la tecnología puede ser un aliado por llevar un control y no afectar las metas personales.
No hay métricas oficiales que puedan cuantificar el impacto de los “gastos hormiga”, dado que la magnitud depende de los ingresos de cada quien.
El café y los pasabocas por fuera de casa suelen ser las principales causas de esta fuga y, según analistas en finanzas personales, los micro gastos pueden representar, en escenarios conservadores, entre 1% y 5% de los ingresos totales para una persona.
Si un trabajador con un salario de $3 millones destina 5% de su ingreso mensual a estos pequeños consumos, anualmente estaría dejando $1,8 millones de su remuneración en ellos. Además, el impulso puede salir más caro ahora que la inflación en Colombia está por fuera del rango meta del Banco de la República y los ingresos no crecen al mismo ritmo que el costo de vida.
De acuerdo con Bancolombia, la característica común que tienen los “gastos hormiga” es que no están presupuestados de forma detallada, “lo que nos hace perder el control sobre cuánto estamos gastando realmente”.
Las billeteras digitales y las aplicaciones pueden ayudar con el registro de cada pago que se realiza con tarjetas débito, crédito y transferencias. Inclusive, algunas permiten anotar los gastos en efectivo. Por ello, se pueden explorar las opciones que incluyen para gestionar cada movimiento. Aplicaciones populares como Bancolombia, Daviplata y Nequi tienen esta herramienta incorporada.
Con la ayuda de esas aplicaciones se pueden jerarquizar los gastos y darles prioridad a los que son vitales y dejar en las últimas posiciones a los que pueden excluirse. Según Bancolombia, esto permite construir un presupuesto que no supere los ingresos.
No solo se trata de hacer un presupuesto, también es importante hacer un seguimiento mes a mes para evaluar si se necesitan ajustes.
Estas App también facilitan el uso de bolsillos con los que puede asignar esos gastos que no se pueden cancelar de una sola vez, como los pasajes de bus. “Esto va a ayudar, pues si en algún momento del mes se empieza a gastar más plata de la que debería, el usuario tendrá que acudir a los Bolsillos de la app y se dará cuenta de que ya está toda destinada para algo. Por lo tanto, comprar algo más implicaría desfinanciar otro gasto. La consecuencia: endeudarse”, subraya Nequi.
Con base en la información que alimenta su capacidad analítica, ChatGPT confirma que, evidentemente, los “gastos hormiga” provocan que una persona pierda el control de sus finanzas.
“Existen aplicaciones como Mint, YNAB, Fintonic y Monefy que permiten a los usuarios rastrear y categorizar sus gastos diarios. Estas aplicaciones pueden mostrar cuánto dinero se destina a gastos hormiga, como café, snacks, o compras impulsivas”, indicó la IA.
El programa también recomienda establecer un presupuesto y no excederlo. Adicionalmente, sugiere automatizar el ahorro programando transferencias automáticas a una cuenta para evitar gastar ese dinero en pequeñas compras.
Si todavía no sabe como organizar un presupuesto, puede consultarle a la IA y ella le dará opciones, las posibilidades con esta herramienta son casi ilimitadas.
La tecnología abre un abanico de posibilidades para tener asistencia financiera gratuita y cumplir con las metas de ahorro: viajes, educación, vehículo o vivienda; objetivos que pueden diluirse cada vez que se pierde el control sobre los “gastos hormiga”
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Estas tienen una numeración, fecha de caducidad y un código de verificación o CVV que solo son válidos para una sola transacción