En cuestión de finanzas es mejor estar asegurado

El seguro es una forma de prevenir riesgos y de ganar tranquilidad. Puede realizarse de manera elemental o a través de un contrato con una compañía que ofrezca este tipo de servicios. En ambos casos, la persona se protege de imprevistos y en el peor de los escenarios de siniestros.

Seguro elemental. Guardar dinero en casa es una costumbre. Sirve para comprar regalos de cumpleaños, matrimonios y demás invitaciones. Estos recursos también permiten cubrir algunos imprevistos, como una emergencia médica, el pago de la consulta con un especialista, la compra de medicamentos, entre otros.

Otro ejemplo, sería un accidente menor con el carro o la reparación repentina del vehículo, lo cual implica comprar repuestos o simplemente ingresarlo al concesionario.

Seguro contractual. Las compañías ofrecen una variedad de alternativas, opciones que consisten en cubrir riesgos que afecten la tranquilidad de los usuarios. Estas se perfeccionan mediante un contrato, documento en el que la aseguradora asume la responsabilidad de pagar una suma de dinero en caso de presentarse un siniestro. Por otro lado, se encuentra el beneficiario, quien deberá pagar una cantidad de plata, periódica (prima), de acuerdo a lo establecido en el contrato.

Existen varias modalidades, entre ellas, el personal, familiar, profesional y empresarial, todos con diferentes beneficios y costos para el tomador.

Desde que iniciamos nuestra labor diaria estamos expuestos a diferentes sucesos que pueden derivar en accidentes o incidentes. Por ejemplo, en el baño, mientras nos duchamos; o practicando un deporte, en el parque, con los amigos o la familia, tropezamos y nuevamente una lesión.

Todos los percances que nos sucedan repercuten en nuestro trabajo, la vida escolar y demás actividades; entonces se deben prevenir guardando las precauciones.

Otro tipo de seguro contractual y que es muy valorado en el mercado, es el de desempleo. Además de ofrecernos tranquilidad, también brinda un respaldo cuando se adquieren créditos bancarios. Este da tranquilidad, la aseguradora asume el valor de las cuotas del préstamo adquirido con el banco, otorgando un espacio mientras se recupera el trabajo, evitándonos contratiempos y posibles embargos.

Otra póliza no menos importante, es la que nos cubre al momento de la muerte, es decir el seguro funerario. Este resguarda los gastos ocasionados por el deceso, costas que generalmente asumen los herederos y que en algunos casos no se cuenta con el dinero para cubrirlos. Se pueden tomar en grupo, se paga una cuota periódica denominada prima, que cubra los gastos en caso de siniestro, librando a los seres queridos de una preocupación mayor.

Finalmente, está el seguro de vejez o invalidez, puede ser voluntario y también obligatorio. En Colombia existen dos regímenes pensionales; el de Prima Media, administrado por Colpensiones, en el que los aportes individuales ingresan a un fondo común; y el de Ahorro Individual, gestionado por Fondos de Pensiones Privados. En este caso, la pensión se construye con el ahorro individual del afiliado.

Recuerde, la tranquilidad es importante para que las personas vivan felices y las decisiones diarias son más acertadas si se toman con serenidad y sin angustia.