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El banco Bbva explicó que la morosidad se define como “la situación de retraso en el cumplimiento de una obligación de pago”
En la búsqueda de estabilidad financiera, cada vez más personas se plantean la necesidad de saldar o reducir sus deudas para facilitar la gestión de sus gastos mensuales. Según el banco Bbva, una revisión de las obligaciones financieras es esencial, especialmente si se enfrenta dificultades para llegar a fin de mes.
Los expertos sugieren que, si la suma de los pagos mensuales de hipotecas, arriendos, préstamos personales y tarjetas de crédito supera 35% de los ingresos, es hora de considerar una reestructuración de las deudas.
Existen dos estrategias principales para saldar deudas: el método de “avalancha” y el método “bola de nieve”. El primero, basado en el análisis económico tradicional, sugiere pagar primero las deudas con los intereses más altos. Una vez saldadas, se puede continuar con las deudas de menor interés.
Por otro lado, el método “bola de nieve”, propuesto por el economista David Ramsey, aconseja empezar por la deuda más pequeña. Una vez pagada, el dinero destinado a esa cuota se aplica a la siguiente deuda más pequeña, y así sucesivamente. Este enfoque puede motivar a los deudores, generando un sentido de progreso, como indica Remi Trudel de la Universidad de Boston.
Un estudio del economista Evan McAllister también respalda esta perspectiva, sugiriendo que, si el objetivo es simplemente pagar las deudas rápidamente, el método de “avalancha” suele ser más eficaz para quienes no enfrentan problemas de motivación.
La morosidad, o incumplimiento de las obligaciones de pago, puede acarrear serias consecuencias, como la inclusión en listas de morosos.
Por lo tanto, es crucial que los consumidores comprendan su nivel de ingresos y gastos antes de contraer deudas. Las deudas deben ser priorizadas en la planificación financiera para evitar problemas económicos futuros.
Bbva explicó que la morosidad se define como “la situación de retraso en el cumplimiento de una obligación de pago”. Este concepto se refleja también en la legislación colombiana y mexicana, donde se establecen condiciones similares para el incumplimiento de las obligaciones financieras por parte de las personas.
