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De acuerdo con expertos en materia de consultoría y finanzas, la división por mitades en los gastos del hogar es la mejor opción
La administración del dinero al momento de independizarse pasa a jugar un papel importante para mantener al día las finanzas personales. Por ello, al mudarse con su pareja, es importante tener en cuenta varios gastos que, de hacerlos de forma compartida, podría economizar su vivienda sin afectar su bolsillo.
Entre los primeros consejos se encuentra la división por mitades de la gran mayoría de gastos de acuerdo con los ingresos que tenga cada uno. En este sentido, se debe tener claro cuáles son los gastos fijos y extra, los cuáles se pueden dividir en partes proporcionales, es decir 50% cada uno. Además, es fundamental saber cuánto dinero en realidad recibe cada uno para después restar los gastos que se generen.
De acuerdo con el sitio inmobiliario Vivanuncios, otro de los consejos que puede ser de ayuda para la repartición de gastos es guardar los últimos recibos de agua, luz y gas, lo que servirá para conocer cuáles son los gastos fijos y reconocer si están gastando de más.
"A cada pareja le funciona una fórmula distinta, pero es recomendable que el aporte a los gastos comunes sea proporcional a los ingresos que cada uno tiene", señaló Maggie Germano, directora de la consultora estadounidense que lleva su nombre.
De acuerdo con la experta, quien tiene más ingresos y aporta más a la "sociedad comercial" de la pareja puede argumentar que el remanente es suyo. Sin embargo, desde otra perspectiva, una pareja puede decidir que "el contrato" de vivir juntos implica compartirlo todo.
Otro de los puntos respecto a la división de gastos hace referencia a las cuentas bancarias, las cuales, en muchos casos son compartidas. Este método puede tener varios puntos a favor y varios en contra, según explicó Germano.
Entre las ventajas se encuentra la simplificación del pago de todas las cuentas, promueve la transparencia y, por último, hay menos probabilidades de encontrarse con "sorpresas desagradables" en relación a los gastos hechos por el otro.
Respecto a las desventajas, la experta asegura que las personas pierden su independencia en términos del control de sus ingresos y gastos. Además, pueden presentarse situaciones en las cuales uno de los miembros puede vaciar la cuenta bancaria o tomar una decisión unilateral sin consulta previa, afectando las finanzas de ambos.
Así, entre otros consejos, lo más importante de compartir los gastos o las cuentas bancarias será en función de los ingresos de cada, pues bajo este factor la repartición será más equitativa.
