MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
ETF hay en el mercado global, los cuales son administrados por 222 entidades. Una opción poco conocida y utilizada por los inversionistas en Colombia para diversificar sus portafolios de inversión de una forma simple y eficiente es la combinación de las ventajas que ofrece el Mercado Global Colombiano (MGC) con la eficiencia implícita en los fondos bursátiles o ETFs (por sus siglas en inglés).
El MGC es un sistema transaccional de cotización de valores extranjeros administrados por la Bolsa de Valores de Colombia, BVC, que fue creado en Colombia en 2011, enfocado en un comienzo a inversionistas institucionales pero que a partir de 2013 se encuentra habilitado para todo tipo de inversionistas. A través del MGC un inversionista en Colombia puede acceder, actualmente, a 25 valores extranjeros (22 acciones y tres fondos ETFs) con las ventajas de que la negociación y complementación se hacen en pesos colombianos bajo las mismas reglas y procedimientos que aplican para acciones locales.
Adicionalmente, no se requieren operaciones cambiarias ni la apertura de cuentas en el exterior. Es importante resaltar que aunque el volumen de negociación en Colombia sea bajo, la liquidez de los valores extranjeros se encuentra atada directamente al monto negociado en el mercado de origen.
Aparte de Colombia, otros mercados de América Latina también cuentan con mercados globales, como es el caso de México y Chile. La evolución del Mercado Global en México ha sido la más destacada en la región, llegando a participar en promedio con 16% del monto total negociado en el país entre 2007 y junio de 2014 (en el primer semestre de 2014 la participación fue cercana a 20%).
Por su lado, los ETFs se asemejan a una cartera colectiva al ser un fondo de inversión que tiene un administrador y que, generalmente, sigue un mandato (por ejemplo: invertir en acciones colombianas, bonos del sector financiero latinoamericano, etc.).
No obstante, estos dos productos se diferencian en que sus unidades están listadas en una bolsa de valores y, por lo tanto, éstas se negocian libremente y su precio cambia durante el tiempo en que esté operando dicha bolsa de valores.
Adicional a estos dos beneficios -negociabilidad y formación de precios- los ETFs son reconocidos en el mundo de las inversiones porque son una herramienta de diversificación muy eficiente en costos, pues permiten que un inversionista al adquirir una unidad de un ETF esté teniendo acceso a un portafolio de acciones, bonos, monedas y/o commodities. Por ejemplo, al adquirir una acción del ETF que replica el índice Standard & Poor’s 500 de Estados Unidos, el inversionista tiene exposición a un portafolio de 500 acciones.
Es por estas ventajas, entre otras, que la industria de ETFs ha crecido significativamente en los últimos años. De acuerdo con la firma de consultoría Etfgi, a julio de 2014 la industria de ETFs a nivel global administraba recursos por US$2,47 trillones (trillón entendido como un millón de millones), US$216.000 millones más que al cierre de 2013.
Actualmente, existen más de 3.800 ETFs de 222 administradores a nivel global que se encuentran listados en 60 bolsas de valores. En el caso de América Latina, 41 ETFs invierten en activos de la región y administran recursos por US$9.000 millones. La bolsa local solo tiene dos productos de este tipo.
Estas tienen una numeración, fecha de caducidad y un código de verificación o CVV que solo son válidos para una sola transacción
Clara Escobar, directora de Afic, advirtió que fraudes electrónicos, como el phishing, crecen pese a reducción del fraude tradicional