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Cada gasto de este tipo suele no parecer importante por el bajo monto que representa e incluye la compra de elementos simples
Mucho se habla de la necesidad de organizar y planificar las finanzas personales basándose en el ahorro, la inversión y la diversificación de fuentes de ingreso. Para ello existen planes como 50-20-30, el retado de las 52 semanas y 'bola de nieve', así como herramientas que le ayudarán a tener una rentabilidad como CDT, Fondos de Inversiones Colectiva (FIC) o sistemas de crowdfunding.
Sin embargo, a la hora de sentarse a pensar y registrar en qué gastará su salario y ese dinero extra que le entra a su cuenta, se suele dejar por fuera lo que se conoce comunmente como 'gastos hormiga'. Estos suelen ser pequeñas compras que, sumadas, dan como resultado un gran capital perdido que impacta sus finanzas a final de mes, e incluso en sus cuentas anuales.
Cada gasto de este tipo suele no parecer importante por el bajo monto que representa e incluye la compra de elementos simples o de satisfacción momentánea e inmediata. En el lista se encuentran aquellas salidas no planificadas a rumbear, una cerveza luego del trabajo, un postre a la hora del almuerzo, membresías de plataformas que no usa, transporte innecesario, domicilios y en general las compras que se realizan por impulso.
Según Mónica Higuera, economista y experta en finanzas personales, "el problema no radica en que se gaste en este tipo de cosas, sino en no tener estos desembolsos dentro de un presupuesto debido a que se tiene que sacar de otro rubro y va a dejar un hueco en otras cosas que se deben pagar".
Para la especialista, este suele ser un gasto inconsciente que está impulsado por la necesidad de evadir otras cosas que llevan a gastar desaforadamente como la ausencia de propósitos claros y aterrizados de lo que se quiere con el dinero.
"Como sociedad se le ha vendido a cada persona que la meta debe ser gigante, pero el proceso inicia realmente por las pequeñas metas, esas que se ajustan a mi realidad y mis capacidades. Muchas personas buscan aparentar o llegar a comprar cosas que se ven lejanas, para lo cual se debe ser consciente de lo que se gana y a dónde se va ese capital con el fin de planificar lo que quiere en el mediano y largo plazo", agregó Higuera.
Entre las recomendaciones para evitar este tipo de gastos es indispensable comenzar a identificar el dinero que sale de su billetera diariamente. Para ello puede llevar una lista en su celular, usar aplicaciones para ello o una libreta, en donde anote cada compra y, de ser posible, guardar los recibos que respaldan dicha transacción.
Posteriormente, lo mejor será sumar los diferentes items de esta lista semana por semana, hasta completar el mes y así tener un panorama completo de aquellos desembolsos de dinero que podrá evitar en los días siguientes.
Otra de las prácticas que podrá emplear será encontrar alternativas como llevar sus propios snacks, establecer un pequeño monto mensual para el día a día, cancelar las suscripciones innecesarias, hacer una lista de compras, disminuir las salidas, cocinar en casa y valerse de aplicaciones para el control de gastos.
"Se trata de entender que uno gasta por lo que siente cuando lo hace. No se trata de merecimiento sino de la capacidad económica solventar ciertos gastos que a la larga termina convirtiéndose en una deuda a través de tarjetas de crédito y comprometiendo la capacidad de comprar una casa u obtener otras cosas que sueña tener", agregó la especialista.
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