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Entre las sugerencias está comparar diferentes opciones, precios y coberturas, revisar las condiciones de la póliza y adquirirlo con entidades autorizadas
Quizás usted sea una de esas personas que en alguna ocasión ha recibido una llamada donde le ofrecen un seguro de vida, pero, por tiempo, ocupaciones y otros factores la comunicación no fue lo suficientemente amplia para conocer en detalle en qué consiste, cuáles son sus beneficios y cobertura.
Basados en este panorama y queriendo ampliar la información, en LR consultamos expertos que detallaron por qué es importante contar con uno de estos y qué tener en cuenta al momento de seleccionarlos.
Lo primero es que revisar la opción de tener un seguro de este tipo es importante porque hay situaciones que no se pueden prever como el fallecimiento, enfermedades, accidentes y/o robos que pueden afectar a los ingresos de la familia o de las personas que dependan de su flujo de caja.
Para Alfredo Barragán, experto en banca de la Universidad de los Andes, lo que debe tener en cuenta al momento de buscar y obtener una póliza de vida es mirar diferentes opciones que ofrece el mercado y solicitar que le expliquen de manera detallada las condiciones que implica el contrato.
En este aspecto, Barragán agregó que se deben comparar precios, servicios, coberturas y garantías. Aquí es de resaltar que un seguro más barato no siempre significa que sea la mejor opción, pues este puede tener menos cubrimientos que otros y podría no estar satisfaciendo sus necesidades.
Para Juan Camilo González, docente de finanzas de la Universidad Externado de Colombia, es imperativo que no se mienta en ninguna de las preguntas o exámenes que la aseguradora le pueda solicitar, pues de esto depende algunas de las condiciones pactadas en la póliza.
En el momento de que ocurra alguna siniestralidad y la firma aseguradora se dé cuenta de información relevante para el caso y que no fue declarada al momento de pactar la póliza, esta podría decir que hay una excepción para no pagar el seguro, destacó González.
De acuerdo con Asobancaria, en su portal ‘Saber más, ser más’, un paso que no se puede dejar de lado es revisar en la página web de la Superintendencia Financiera el listado de aseguradoras e intermediarios de seguros autorizados, pues esto garantiza que cumplen con las normas y no lo van a estafar.
El gremio de bancos también sugiere revisar con su entidad bancaria los planes de seguros de vida o los convenios que esta tenga con instituciones aseguradoras, pues por esta vía el proceso podría ser más eficiente y rápido.
Un punto esencial que no debe faltar en el listado de cosas por revisar es realizar una evaluación real del monto por el que desea asegurarse e incluirlo en su presupuesto. Si esta situación no se tiene en cuenta, los montos muy altos podrían afectar el flujo de caja y al final usted podría optar por cancelarlo en una situación económica ajustada.
En este punto, Barragán destacó que debido a que el monto asegurable está directamente asociado con el valor de la prima mensual, es recomendable iniciar el proceso de manera escalada; es decir, que “se puede comenzar con una prima baja y a medida que van aumentando los ingresos y se consolida el hábito se puede aumentar el valor asegurable y por ende el de la prima mensual”.
González resaltó que en caso de que le ofrezcan la opción de seguro de vida con ahorro se deben revisar muy bien las características de rentabilidad y liquidez de dicho componente. En ocasiones, es posible que “a largo plazo sea mejor negocio ahorrar en otro tipo de mecanismos como fondos de pensiones voluntarias y no con el seguro”.
Si bien asegurarse es un punto clave, también se debe escoger a los beneficiarios y la participación que cada uno de estos tendría. Además, es importante informarles de este proceso para que sepan qué hacer en caso del siniestro y cómo reclamar dicho seguro.
Los resultados del primer estudio sobre la demanda de seguros
A finales del año pasado la Superfinanciera, la Banca de las Oportunidades y Fasecolda entregaron los resultados de esta investigación que analizó a 11,5 millones de hogares, donde 90,3% tiene al menos un seguro. Aunque la cifra es alta, el reto del sector es que solo 30,3% de los colombianos cuenta con un seguro voluntario. Para los expertos, aunque la brecha en el país aún es amplia, esto también demuestra una oportunidad para que las aseguradoras busquen la manera apropiada de llegarle al 70% restante que no accede a un seguro voluntario.
Estas tienen una numeración, fecha de caducidad y un código de verificación o CVV que solo son válidos para una sola transacción
Clara Escobar, directora de Afic, advirtió que fraudes electrónicos, como el phishing, crecen pese a reducción del fraude tradicional