La mayoría de los mercados bursátiles de Asia cedía el martes y las monedas vacilaban en rangos estrechos en momentos en que una ausencia de noticias económicas importantes dejaba a los inversores preocupados sobre las perspectivas de la política monetaria en Estados Unidos y Europa.
Siguiendo la dirección de Wall Street, el índice MSCI de acciones asiáticas no japonesas bajaba un 0,6 por ciento. Shanghái perdía un 0,8 por ciento, y Seúl se debilitaba un 0,2 por ciento.
De vuelta de un feriado, el índice Nikkei de la bolsa de Tokio cayó un 0,1 por ciento.
A falta de un culpable obvio, los operadores tendían a responsabilizar a la incertidumbre acerca de cuándo la Reserva Federal de Estados Unidos comenzará a reducir su compra de activos tras la decisión sorpresiva de la semana pasada de mantener su programa de estímulo sin cambios.
"Yo creo que había una sensación de complacencia antes, acerca de que la Fed podía impulsar el mercado al alza simplemente por hacer lo que estaba haciendo", dijo Damien Boey, estratega de Credit Suisse.
"Sin embargo, ahora ha habido una reflexión sobre eso y el mercado se ha desprendido y creo que va a continuar", agregó.
Los movimientos de las monedas eran modestos. El euro cotizaba a 1,3493 dólares después de haber caído un 0,2 por ciento el lunes. Tanto el euro como el dólar perdían terreno frente al yen, que se afirmaban 98,76 unidades por dólar.
El resultado neto dejaba al dólar con pocos cambios frente a una canasta de monedas a 80,469, y aún demasiado cerca de un mínimo en siete meses alcanzado la semana pasada.
Los datos económicos han sido demasiado contradictorios para ofrecer mucha dirección.
La lectura provisional del índice de gerentes de compras (PMI, por su sigla en inglés) del sector manufacturero estadounidense elaborado por Markit bajó inesperadamente a 52,8 este mes desde 53,1 en agosto.
Eso contrastó con el PMI de Markit para la zona euro, que subió a 52,1 en septiembre desde 51,5 el mes pasado, su nivel más alto desde junio del 2011. El dato vino después de un sondeo más firme que lo esperado en el sector manufacturero de China.
En los mercados de materias primas, el oro se estabilizaba en 1.327,50 dólares la onza luego de no poder sostener su repunte inspirado en la sorpresa de la Fed de la semana pasada.
La historia era similar en los futuros del cobre que se mantenían en 7.227,51 dólares la tonelada, retrocediendo desde el máximo de la semana pasada de 7.368,00 dólares.
El crudo Brent de Londres bajaba un centavo a 108,15 dólares el barril, mientras que el petróleo estadounidense perdía 3 centavos, a 103,56 dólares el barril.
