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La mitad de los retiros de estos recursos en Colfondos fueron por desempleo
De acuerdo con las cifras reportadas por la Asociación Colombiana de Administradoras de Fondos de Pensiones y Cesantía (Asofondos), en 2018 los trabajadores colombianos retiraron $5,5 billones de sus cesantías.
Si bien esta prestación fue creada por El Código Sustantivo de Trabajo con el fin de que el trabajador tuviese recursos de respaldo en caso de quedar desempleado, las cesantías también se pueden utilizar para otros fines como compra o remodelación de vivienda, y para educación del afiliado o de su núcleo familiar.
El año pasado, en tres de los cuatro fondos que administran estos recursos, la mayoría de las cesantías se retiraron para adquirir vivienda o para hacer remodelaciones locativas.
En el caso de Porvenir, que con 4,23 millones de afiliados a cesantías es el fondo con mayor número de clientes, $1,22 billones se retiraron para este propósito.
La segunda razón para sacar las cesantías con el monto más alto fue desvinculación laboral, por $1,13 billones; mientras que para educación se destinaron $324.000 millones. En total, los afiliados a Porvenir retiraron $2,7 billones de las cesantías.
Protección, que tiene 2,55 millones de afiliados a cesantías, dio a conocer que se pidieron $2 billones de estos recursos. De estos, $1,08 billones se destinaron a gastos relacionados con vivienda, $660.000 millones se usaron por pérdida de empleo y $220.000 millones se fueron a educación.
Si bien la mayoría de los retiros de cesantías fueron para vivienda, Juan David Correa, presidente de Protección, señaló que el uso por terminación laboral sigue siendo importante y su tendencia está en crecimiento.
“El uso de sus cesantías para fines de desvinculación laboral creció, de 2017 a 2018, en 12%, pasando de tener un peso sobre el total de los retiros de 29% a 33%. Los demás usos conservan la misma tendencia que en el año anterior”, resaltó.
En cuanto a Old Mutual, que cuenta con 43.194 afiliados a su fondo de cesantías, $48.493,9 millones de los $90.925,4 millones retirados se destinaron a mejoramiento y compra de vivienda. Por terminación de contrato se usaron $27.936,8 millones y para educación, 9.246,2 millones.
Por el contrario, el único fondo en el que la mayoría de los recursos de cesantías fueron por desempleo fue Colfondos, que tiene 768.000 afiliados. De los $536.782 millones retirados, $268.391 millones se explican por esta causa. En cambio, $198.609,3 millones se destinaron a usos relacionados con vivienda y $69.782 millones se utilizaron en educación.
“Nuestra recomendación siempre será que los trabajadores asuman estos recursos como el mejor seguro de desempleo y en ese sentido que las ahorren, eligiendo la administradora que les brinda las mejores rentabilidades”, dijo Alain Foucrier, presidente de Colfondos.
Según cifras de Asofondos, en los últimos 10 años, los colombianos han retirado $35,4 billones en cesantías. De estos, $17,6 billones se han destinado para vivienda y $12,5 billones por terminación de contrato. En esta década, el número de afiliados a fondos de cesantías aumentó en 68%.
Opción para el pago de los empleados
Banco de Bogotá ofrece nueve líneas de crédito para el pago de las cesantías, que por ley se deben pagar antes del 15 de febrero. El banco ofrece créditos con plazos que van desde dos días hasta 24 meses, con el fin de que las empresas realicen puntualmente el desembolso de estos recursos a los empleados. También cuenta con una línea especial de financiación del valor total o parcial del compromiso con el Fondo de Cesantías Porvenir en un plazo máximo de 12 meses.
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