El dólar volvió a romper la barrera de los $3.100 y tocó máximos de $3.106

El desplome de los precios internacionales del petróleo, sumado a las cada vez mayores probabilidades de un incremento de tipos de la Reserva Federal y al aumento de las tensiones fiscales locales, han soportado el rally alcista del dólar, que en la jornada de ayer volvió a romper la barrera de los $3.100 hasta tocar un máximo de $3.106,75.

Este es el mayor nivel operado de la moneda extranjera desde el pasado 30 de noviembre, cuando cerró en promedio a $3.165,09. En lo que va de año, el dólar había fluctuado entre mínimos de $2.855 y máximos de $3.084, siendo la última quincena la de mayor fortaleza de 2017 al estar todos los días por encima de los $3.000 por unidad.

La causa principal de la tendencia alcista de la divisa ha sido la caída de los precios internacionales del petróleo desde el pasado 21 de junio, cuando el barril se acercó a los US$40. El interrogante surgió semanas después pues aunque el precio de este commodity recuperó algo de fuerza, el dólar nunca la perdió.

En la jornada de ayer, el crudo se volvió a desplomar cerca de 3% debido al aumento de la producción petrolera de Estados Unidos, que creció la semana pasada 1% a 9,34 millones de barriles por día (bdp) lo que al coincidir con los máximos de junio de las exportaciones de la Opep, podría tambalear el pacto del grupo para frenar la producción hasta marzo de 2018.

La correlación negativa entre ambos sí se sintió este viernes cuando el dólar y el petróleo se movieron en direcciones contrarias. Mientras que los referenciales WTI y Brent cayeron 2,79% a US$44,25 y 2,87% a US$46,73, respectivamente, el dólar alcanzó un precio promedio de $3.092,79, lo que representó una subida de $4,6 frente a la Tasa Representativa del Mercado (TRM), que se ubicó en $3.088,19.

De acuerdo con la plataforma Set-Fx, a lo largo de la jornada, la divisa se movió entre un precio mínimo de $3.083,55 y un máximo $3.106,75. Además, se llegó a negociar un monto total de fue US$1.100 millones en 1.514 operaciones.

“Con un WTI cotizando por debajo de los US$45, el dólar alcanzó máximos del año. El castigo que le ha dado el mercado al precio del crudo debido a que las refinerías elevaron su producción durante el último mes ha hecho que las monedas emergentes se desvaloricen contra el dólar de manera importante”, indicó Juan Carlos Cendales, director de divisas de Credicorp Capital, quien sostuvo que la presión de los buenos datos económicos de la economía estadounidense dejan la puerta abierta a una posible subida de tipos de la Fed por tercera vez en este año, pese a una inflación contenida.

Precisamente, en la jornada de ayer el Banco Central de Estados Unidos aseguró a través de su reporte semestral al Congreso que la economía norteamericana se mueve a un ritmo estable y, según recogió Reuters, perciben “lecturas saludables de confianza del consumidor e inversión y señales solo moderadas de riesgo en los mercados financieros”.

Esto se dio luego de la divulgación de un sólido dato de empleo en junio en el país del Tío Sam, donde las nóminas no agrícolas escalaron en 222.000 puestos de trabajo frente a los 178.000 esperado por los economistas del mercado.

A nivel local, los inversionistas están atentos al aumento de la emisión de deuda interna que reafirmó las dificultades de consolidación fiscal en el largo plazo desde la publicación del Marco Fiscal de Mediano Plazo.

“Existe una incertidumbre frente al cumplimiento de las expectativas de crecimiento del Gobierno, lo cual podría tener implicaciones negativas en el frente fiscal y considerable deterioro en la calificación de riesgo del país han debilitado el peso colombiano. Lo anterior, se ha percibido en la salida de inversionistas de portafolio del exterior en Colombia en las últimas semanas (lo que ha afectado también a los TES)”, indicó Julián Cárdenas Fonseca, analista de Protección.