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La divisa cerró la última jornada en $4.233,55, ganando $38 frente a la TRM. Según los analistas, la movida se dio tras la caída en los precios del petróleo y la compra de divisas
Luego de 15 días cotizando abajo de $4.230, el dólar volvió a ganar terreno ubicándose arriba de este umbral, impulsado, principalmente, por la debilidad en los precios de las materias primas.
Y es que, la divisa cerró el martes al alza en $4.233,55, ubicándose $38,58 arriba de la Tasa Representativa del Mercado, que estaba en $4.194,97. Además, tocó un precio máximo de $4.255, mientras que el mínimo fue de $4.217,50. Se registraron 2.113 transacciones al cierre de la jornada por un monto de US$1.519 millones.
Según Bloomberg, las tensiones geopolíticas en el Oriente Medio siguen favoreciendo el atractivo de la moneda estadounidense como refugio seguro.
David Cubides, director de investigaciones económicas de Alianza Valores, señaló que vieron “algo de proyección en el dólar en América Latina, las monedas emergentes un poco un poco presionadas y allí también el peso colombiano. Por otro lado, vimos algo de caída en los precios del petróleo que están impactando en el corto plazo a Colombia”.
Por su parte, Yovanny Conde, cofundador de Finxard, indicó que “es un movimiento regional motivado por la debilidad de las materias primas, especialmente del petróleo, que está presionando la devaluación de las monedas en países como el nuestro”.
De hecho, el martes el petróleo Brent y el WTI cayeron más de 4% dada la coyuntura global. Sin embargo, Hezbolá dejó la puerta abierta a un alto el fuego negociado con Israel, después de que fuerzas israelíes elevaron las apuestas en el conflicto con su enemigo respaldado por Irán al realizar nuevas incursiones en el sur del Líbano.
“El conflicto en Oriente Próximo está en ebullición y enciende el temor a una escalada y de interrupciones en el suministro de petróleo. El escenario más probable es otro choque suave, con los precios del petróleo subiendo y bajando de nuevo antes de fin de año”, dijo Norbert Ruecker, del banco de inversión Julius Baer.
No obstante, hay otros factores internacionales que presionaron la divisa. Según Cubides, “el dólar se vio presionado ante el dato de empleo que salió la semana anterior, con las señales un poco más positivas en los Estados Unidos y que trajeron algo de calma en este mercado, ante lo cual se ha dado un poco más de compra de dólar americano”.
En materia local, el lunes salió el dato de inflación, que quedó en 5,81%, el más bajo desde diciembre de 2021; algo que también influyó en el comportamiento.
“El lunes conocimos el dato de inflación local que siguió retrocediendo en septiembre, lo que le permite al Banco de la República seguir recortando las tasas de interés en sus próximas reuniones. Esto reduce el atractivo del carry trade, que es una estrategia que había favorecido al peso frente al dólar debido al diferencial de tasas de interés, sobre todo en la primera parte del año”, explicó Gabriel Bautista, analista de contexto externo y mercado cambiario de Corficolombiana.
Hay momentos en los que el ruido en el mercado es tal, que los inyectores de capital buscan refugiarse en activos fuertes y seguros. Un ejemplo de esto son las tensiones geopolíticas en Medio Oriente o cuando se prevé una recesión en EE.UU. Las características de un activo de este estilo parten de qué tan operable o qué tan fácil es invertir en él. Camilo Pérez, Dir. de investigaciones económicas del Banco de Bogotá, aseguró que siempre se buscan los TES de Estados Unidos. “Es el activo más líquido que hay en el mundo, es el mercado más grande que hay en monto, se podría invertir o desinvertir en tesoros en cualquier hora del día”, dijo.
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