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Dentro de las razones por las que los comercios prefieren el efectivo como medio de pago, es por la facilidad, rapidez, y la posibilidad de reutilizarlo de manera inmediata
A pesar del auge de los medios de pago electrónicos y digitales, el efectivo sigue siendo el preferido por muchos colombianos para realizar las compras diarias en establecimientos comerciales. El reciente informe del Banco de la República sobre la percepción del uso de los instrumentos para los pagos habituales en Colombia, muestra que los billetes físicos continúan teniendo una fuerte presencia en la vida cotidiana, especialmente en el contexto de los comercios, que abarcan tanto compras como buses y peajes.
Precisamente estos últimos son los protagonistas del efectivo, pues según cifras del informe, 85% de los buses en el país y 75% de los peajes solo reciben efectivo como medio de pago. A estos les siguen los taxis y las tiendas de barrio, con 38% y 35%, respectivamente.
En el caso del transporte, Transmilenio y los buses del Sitp usan una tarjeta exclusiva para pagar, que para recargarse en puntos físicos debe ser con efectivo para así poder acceder al medio de transporte. Esto genera dificultades para quienes deseen pagar con tarjetas débito, crédito o billeteras digitales, siendo este último un medio que está teniendo gran acogida, pues, según Credicorp, 61% de los colombianos usan una billetera digital.
Esto plantea un escenario complejo, pues 100% de los comercios reciben efectivo, pero cuando se trata de otros medios de pago la aceptabilidad cambia, por ejemplo, los buses, las tiendas de barrio, las papelerías, las misceláneas, las panaderías, y algunos restaurantes son los comercios que menos variedad de medios de pago tienen.
En realidad no es solo una, hay varias razones por las que los comercios optan por los billetes físicos en lugar de transferencias o tarjetas, en orden de importancia está que es considerado fácil y rápido (21,5%), es posible su reutilización de manera inmediata (16,6 %), permite la entrega de cambio (16,2%), costumbre (14,3 %) y la ausencia de datáfonos (9,9 %).
Ahora, entre los canales comerciales cuya principal razón para recibir efectivo es su facilidad y rapidez están los buses con 33,7 %, los minimercados y supermercados de barrio con 26,3 %, las estaciones de servicio con 25,9 %, las ferreterías con 25,4 %, las peluquerías con 25,3%, las administradoras de peajes e hipermercados con 25%, entre otros.
Por su parte, según indicó el informe, los canales como las administradoras de peajes, los minimercados y supermercados de barrio son los que más consideran al efectivo por su característica de reutilización inmediata.
Entre los canales comerciales que prefieren el efectivo por permitir la entrega de cambio están también las administradoras de peajes, las estaciones de servicio y los taxis. Los hipermercados y las estaciones de servicio, por su parte, lo usan más por costumbre.
Finalmente, la razón sobre el uso del efectivo por ausencia de datáfonos la manifestaron especialmente las cafeterías y las tiendas de barrio. Esto plantea un escenario de dificultad, en el que ciertos sectores de la economía necesitan más espacios de inclusión financiera que les permitan encontrar en la variedad de medios de pago una oportunidad de crecimiento en sus comercios.
Los estratos sociales en donde el efectivo sigue siendo el medio preferido
Según el informe del Banco de la República, quienes más usan efectivo, suelen ser personas, sobre todo, de estratos uno, dos y tres. Sin embargo, estratos como el cuatro y el cinco también tienen el papel moneda como uno de los principales medios de pago, pero compartido con tarjeta débito y transferencias electrónicas que alcanzan a tener una participación por encima de 30%. En el estrato seis, el efectivo representa 46,6%, una participación muy similar a la de las transferencias electrónicas, que también tienen 46%.
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