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Se confirmó que el enlace accionario entre Argos y Sura acabará. Ambas se comprometieron a crear una estructura de transición
Ayer dos compañías legendarias en la historia empresarial de Colombia anunciaron que comenzarán la operación para poner fin a su propiedad cruzada. Se trata de Grupo Argos y Grupo Sura.
Sura anunció ayer la firma de un memorando de entendimiento en el que se establece que propondrán una estructura de transición para ser una compañía independiente de Argos. “El objetivo del memorando es explorar una estructura de transacción que termine o reduzca de manera organizada las participaciones cruzadas entre Grupo Argos y Grupo Sura. Básicamente, están trabajando para que las participaciones cruzadas se eliminen o se reduzcan significativamente”, aseguró Yovanny Conde, cofundador de Finxard.
Con esto, Sura ya no tendrá participación en Argos y viceversa. Este movimiento se da después de la cascada de Ofertas Públicas de Adquisición, OPA, lanzadas por Jaime Gilinski, que produjeron la salida de Nutresa del bloque, y ahora la desinversión de las otras dos compañías.
Este enroque, que inició por los problemas económicos de finales de la década de los 70, esto junto con algunos malos negocios, estafas y la entrada de inversionistas desconocidos a Antioquia, prendió las alarmas de los empresarios paisas.
Es por esto que los antioqueños decidieron protegerse con un cruce accionario, inspirados en el modelo Keiretsu japonés, en el que se compartían títulos entre diferentes sociedades para enrocar el patrimonio entre pocos grupos empresariales.
De este enroque fueron parte más de un centenar de empresas que compraron acciones entre sí, entre ellas Suramericana de Seguros, Cementos Argos y la Nacional de Chocolates, que desde la primera década de este siglo, comenzaron a consolidarse societariamente en lo que hoy se conoce como Grupo Argos, Grupo Sura y Grupo Nutresa.
“El objetivo del memorando es explorar una estructura de transacción que termine o reduzca de manera organizada las participaciones accionarias cruzadas entre Grupo Argos y Grupo Sura”.
“Se necesitan las autorizaciones de junta y asamblea para el cambio de la estructura de capital, fruto del proceso de desenroque y que requirió de un nuevo decreto de permuta de acciones”.
Estos lazos, fortalecidos por más de 50 años, se empezaron a romper después de las OPA lanzadas por Gilinski al GEA y ayer tanto Sura como Argos se comprometieron a negociar exclusivamente y proponer a sus respectivas juntas directivas una estructura de transacción que tenga como resultado dos compañías independientes, de manera que, en la medida de lo posible, Grupo Argos y Grupo Sura no sean inversionistas recíprocos, ni directa ni indirectamente.
Además, las compañías proponen una estructura de transacción que garantice el trato equitativo a los accionistas de las compañías intervinientes; que sea eficiente y viable en términos financieros, legales, contables y en tiempos de ejecución; que permita a cada una de las partes continuar profundizando su especialización, desarrollando su plan de negocios en el largo plazo.
Diego Palencia, vicepresidente de investigaciones y estrategia de Solidus Capital Banca de Inversión, explicó que “se necesitan las autorizaciones de junta y asamblea para el cambio de la estructura de capital, fruto del proceso de desenroque que se dio por Grupo Nutresa y que requirió de un nuevo decreto de permuta de acciones, un memorando de entendimiento entre accionistas”.
La primera Asamblea de la jornada del lunes fue la de Grupo Argos, en la que Jorge Mario Velásquez, presidente de Grupo Argos, reiteró que, con apoyo de consultores externos, se han revisado las alternativas estratégicas respecto a los derechos económicos en Sura, que ascienden a 45,8%.
Enfatizó en que la asamblea celebrada no tenía como objetivo pedir autorización para ejecutar las mencionadas alternativas y destacó que el objetivo era someter a decisión de los accionistas si habilitaban a cuatro miembros de la Junta Directiva, que comunicaron posibles conflictos de interés, para deliberar sobre este asunto. Con un quórum superior a 77%, los propietarios levantaron los conflictos de interés a Claudia Betancur, Jaime Alberto Palacio, Juana Francisca Llano y Ricardo Jaramillo. Además, dieron el visto bueno a los representantes legales.
En medio del encuentro, los pequeños accionistas le consultaron al presidente de Grupo Argos si había un cronograma definido para concretar la operación, ante esto contestó que “hoy no tenemos un marco rígido para decidir sobre las alternativas con las acciones de Sura, pero nos va a tomar un tiempo prudencial estudiarlo porque es una decisión trascendental”.
La asamblea de Grupo Sura, también celebrada el lunes, autorizó a cuatro miembros de Junta Directiva y a tres representantes legales para participar en las deliberaciones sobre la futura estructura de propiedad y su participación en Grupo Argos.
Al concluir la reunión, quedaron habilitados Velásquez, Alejandro Piedrahita y Luis Javier Zuluaga. También habilitaron a Jaramillo, Juan Esteban Toro y Juan Luis Múnera.
Actualmente, Grupo Sura tiene una participación de 36% en Grupo Argos y el mercado estará atento al destino que los representantes legales y las juntas directivas le otorguen a esas participaciones. La acción de Grupo Sura cotiza sobre $32.000, mientras que la de Grupo Argos se mueve encima de $19.000.
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