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Javier Cuéllar, presidente del Fondo Nacional de Garantías, señaló que su objetivo para 2026 es garantizar cuatro millones de créditos
El Fondo Nacional de Garantías, FNG, es una entidad del Gobierno Nacional cuya misión, más allá de respaldar a las empresas consolidadas, se ha ampliado para incluir a los micronegocios y a la economía popular, al facilitar el acceso al crédito a quienes tradicionalmente no han tenido opciones en el sistema financiero. Su presidente, Javier Cuéllar, habló sobre el proceso de transformación de la entidad y los retos de su gestión.
Según Cuéllar, la meta principal del FNG es ambiciosa: respaldar créditos por cerca de $90 billones entre 2022 y 2026. Sin embargo, para él, el impacto se mide en historias de vida y número de personas, no en cifras. “Nosotros queremos concentrarnos en el número de personas, en el impacto directo. En el pasado garantizábamos en promedio 300.000 créditos al año, pero este año llegaremos a 1.3 millones, y nuestro objetivo para 2026 es llegar a garantizar cerca de 4 millones de créditos”, afirmó.
Este enfoque ha significado una transformación en los tipos de crédito que el FNG apoya. “Históricamente, el FNG había respaldado principalmente créditos de mayor valor, en promedio de $50 a $55 millones, dirigidos a pequeñas y medianas empresas,” señaló Cuéllar. “Hoy en día, hemos bajado ese promedio a $3 millones para llegar a micronegocios, a quienes muchas veces acceden al financiamiento informal”. Con esta estrategia, el Fondo espera reducir la dependencia de los colombianos en mecanismos costosos como el gota a gota, y fomentar un crecimiento inclusivo de la economía popular.
Para Cuéllar, esta renovación tiene una carga importante de innovación, tanto en los servicios como en la filosofía de la entidad. “Desde mi llegada, hemos querido que el FNG esté más enfocado en apoyar los micronegocios, los trabajadores independientes y la economía popular. Este es un cambio que va más allá de lo financiero, es una apuesta social.” En esa misma línea, la entidad ha diversificado sus áreas de apoyo, abriendo nuevos caminos para que personas en sectores vulnerables puedan acceder a pequeños créditos con garantía estatal.
Además del respaldo a créditos comerciales, el FNG ha identificado otras necesidades claves de los colombianos: el mejoramiento de vivienda y la educación. Cuéllar explicó que uno de los cambios ha sido dirigir garantías para créditos de bajo monto destinados a la mejora de viviendas. “No se trata de grandes hipotecas, sino de microcréditos para que una familia que tiene piso de tierra o una cocina sin gas pueda mejorar sus condiciones de vida”, enfatizó.
Recientemente, el FNG fue nombrado como la mejor empresa para trabajar en Colombia, un reconocimiento que Cuéllar atribuye al enfoque humano que ha promovido en la entidad. “Nuestro legado no solo es garantizar créditos, sino sembrar en nuestra gente un compromiso genuino por el servicio público”, dijo.
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