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En Porvenir, la adquisición de vivienda sumó en retiros $1,27 billones, mientras que en Protección esa destinación lideró con 55% del total de cobros para la prestación social
El próximo 14 de febrero es la fecha límite para el pago de cesantías por parte de los empleadores del país, a propósito de la ocasión, algunas Administradoras de Fondos de Pensiones y Cesantías (AFP) han hecho un balance del retiro de esta prestación social durante 2021.
Erik Moncada, vicepresidente de Clientes y Operaciones de Porvenir, destacó el impacto que tienen las cesantías como aliado de los trabajadores en tiempos de incertidumbre. “Este es un ahorro con propósito y, por ello, esperamos que los colombianos sigan haciendo un uso responsable de estos recursos y que los empresarios sigan cumpliendo con el pago de esta prestación social, que se puede consignar hasta el próximo 14 de febrero”.
Si bien 2021 fue un año de incertidumbre, también se llevó a cabo un avanzado proceso de recuperación principalmente liderado por los incentivos que generó el Gobierno en diferentes industrias. Uno de los mecanismos que más movilizó a la economía fueron los subsidios para la compra de vivienda VIS (vivienda de interés social) y no VIS.
Esto se vio reflejado en el retiro de cesantías. En Porvenir, de los $3,4 billones que se retiraron en total, $1,27 billones fueron destinados a compra de vivienda, en Protección el rubro también llevó la delantera con 55% de las cobranzas y en Skandia la compra de inmueble fue el segundo motivo en el que más se retiró con extracciones que sumaron más de $69.500 millones.
El retiro de cesantías dinamizó la industria inmobiliaria. El cierre del 2021 evidenció que la compra de vivienda VIS y No VIS en el país alcanzó cifras récord, con ventas de más de 170.000 unidades habitacionales con un aumento de 48% frente a 2020.
“Reiteramos nuestra invitación a elevar la cultura de ahorro en Colombia y aprovechar temporadas como estas de consignación de cesantías para poder construir ese capital que nos permitirá escribir el futuro que se quiere, un futuro en el que también es fundamental poder contar con un respaldo que nos permita tener bienestar en momentos retadores, que como aprendimos en medio de la coyuntura, pueden llegar inesperadamente”, explicó Juan David Correa, presidente de Protección.
“Esperamos que los colombianos sigan haciendo un uso responsable de estos recursos y que los empresarios continúen cumpliendo con el pago”.
“Reiteramos nuestra invitación a elevar la cultura de ahorro en Colombia y aprovechar temporadas como estas de consignación para poder construir ese capital”.
Otro rubro que llamó la atención fue el de terminación de contrato, pese a que la última cifra del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) apuntó a que noviembre tuvo el desempleo más bajo de la pandemia (10,8%), aún el dato no se ubica en el nivel de 2019 (9,3% en el mismo mes). Porvenir destinó $1,23 billones a este propósito, para Skandia fue el rubro con más retiros con $74.000 millones.
Para educación los afiliados de Porvenir retiraron $250.279 millones, los de Skandia $20.000 millones y en Protección este el segmento académico tuvo un avance de 11% frente 2020. Las reparaciones locativas para vivienda en Porvenir costaron $561.069 millones y en Skandia $48.000 millones.
Los rubros para retiro de cesantías están establecidos por el Gobierno Nacional y las autoridades financieras y exigen determinada documentación: para adquisición de vivienda su AFP le solicitará la documentación del inmueble; si es para educación, el recibo de pago de la institución educativa; y si es por desempleo, carta de terminación del contrato de su compañía.
El propósito de este ahorro es que las personas tengan una cobertura en momentos importantes de su economía personal, mientras las cesantías no se retiren generan un rentabilidad a partir desde el porcentaje mínimo exigido por la Superintendencia Financiera de Colombia.
Como todos los sectores de la economía, la pandemia también significó la digitalización del pago y cobranza de las cesantías. Porvenir reportó transacciones digitales por $1,4 billones, lo que representa un aumento de 30,8% frente a las registradas en 2020, año en el que se realizaron operaciones por $1,1 billones. Además, la administradora permite consignaciones de la prestación social a través de billeteras digitales como dale!, Daviplata y Nequi.
La sanción para el empleador que no haga la consignación a tiempo
La empresa que no haga el pago de la prestación social antes del 14 de febrero deberá pagar a cada empleado un día de salario por cada día de retraso en el pago. Cabe recordar que para el cálculo de las cesantías hay que tomar el salario base, multiplicado por el número de días trabajados; este resultado se dividirá entre 360. Por ejemplo, si un empleado ingresó en febrero de 2021 con un salario de $2 millones, teniendo en cuenta que desde ese mes hasta el 31 de diciembre de 2021 hay 334 días, su pago será $1.855.555 en cesantías y la sanción de no pago en 60 días de mora será de $3,9 millones.
La Ley 1788 también habilitó el pago de esta prestación a los trabajadores del servicio doméstico
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