Mastercard cambia sus tarjetas de débito para ganar terreno en el e-commerce

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“Viene una nueva generación del débito”, dice Marcela Carrasco, presidente de la recién creada División Andina de Mastercard, mientras señala que con la tarjeta Mastercard Débito, que reemplazará a los plásticos Maestro, se podrán hacer transacciones en el comercio electrónico con las mismas condiciones de seguridad que actualmente tienen los plásticos de crédito. En diálogo con LR, la ejecutiva explicó cómo avanza este proceso de innovación, por qué se creó la división que hoy preside, y por qué no hay que tenerle miedo al crédito.

¿Qué significa que la nueva División Andina se controle desde Colombia?
La razón principal es estar mucho más cerca a los mercados y a los clientes. Se creó esa División porque hay bastante afinidad en las oportunidades que tenemos alrededor de estos mercados. En todos estos países hablamos de que la penetración de métodos de pago electrónicos es baja, de entre 3% y 15%.

¿En Colombia de cuánto es esa penetración?
Estamos en 15%.

¿Cómo está la participación de mercado en el país?
Tenemos un crecimiento al igual que en toda América Latina, sostenido, de dos dígitos desde hace varios años, y hemos hecho una gran labor en el tema de aumentar la activación en el uso de medios de pago electrónicos en actividades cotidianas, por ejemplo, en el sistema de transporte masivo. Nos tenemos que expandir a los pequeños comercios y vienen nuevas soluciones tecnológicas que facilitan el proceso, desde el celular, que nos van a permitir tener un crecimiento importante.

¿Cuándo podría llegar esa innovación?
Quizás la nueva tecnología se despliegue este año.

¿El acceso tecnológico es la principal traba para que los comercios usen esos productos?
No solo la tecnología, sino que la solución debe realmente tener una propuesta que cubra una necesidad y que sea fácil. Entendemos que se requiere un cambio de hábitos.

Ahí los bancos son cruciales, ¿con cuántos trabajan?
Trabajamos con todas las instituciones financieras. Todos los bancos que tienen licencia Mastercard emiten productos de crédito y débito y trabajamos en la evolución digital porque vemos que en menos de cinco años las transacciones de e-commerce serán más que las físicas.

¿Cómo es la relación entre transacciones físicas y digitales?
En América Latina 80% son físicas y 20% digitales, pero en 2023 las de comercio electrónico serán 55%.

¿Qué papel juega ahí la seguridad?
Trabajamos para llevar los mismos niveles de seguridad del mundo físico al digital. Estamos desarrollando herramientas de autenticación y ‘tokenización’ para que el número de la tarjeta no se exponga.

¿Qué población pide más tarjetas de crédito?
Se está creciendo mucho en la clase media y se debe, en parte, a las alianzas que tenemos con los comercios.

El crédito de consumo es el que más crece, ¿al colombiano le gusta endeudarse?
Se debe saber qué se necesita en cada etapa de la vida y entender que las tarjetas de crédito pueden ser tarjetas de pago. Debemos trabajar en la educación financiera.

¿La gente le tiene miedo al crédito?
Hay que saber planear y ser juicioso. No hay que tenerle miedo al crédito, hay que darle un buen uso.

¿Qué innovaciones se vienen en las tarjetas débito?
Con Mastercad Débito viene una nueva generación del débito. Es la joya de la corona y la principal innovación porque será una tarjeta débito que se podrá usar en e-commerce con seguridad. Las tarjetas Maestro no permiten uso en comercio digital y estas nuevas tarjetas tendrán un uso parecido a las de crédito. Estamos acelerando la adopción del producto a la velocidad que cambia el mercado, pero todos los emisores de Maestro deben hacer el cambio de los plásticos hacia esta tarjeta más poderosa.

Características de las credenciales de pago
Para Carrasco, en el corto plazo, las tarjetas débito y crédito migrarán hacia las credenciales de pago, esto porque “finalmente se va a tener un número que estará conectado en el sistema financiero y tendrá las herramientas de seguridad”. Precisamente, esas cualidades son la ‘tokenización’, que consiste en la capacidad de generar un código encriptado en cada transacción que no deja ver los números de las tarjetas. A lo que se suma la autenticación, que se trata de tecnología de pagos que utiliza la biometría para verificar al tarjetahabiente.