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Las dos referencias de crudo tocaron máximos no vistos desde octubre de 2018. La IEA anunció que la demanda aumentará a 100 millones de barriles diarios
Ayer, el petróleo tocó nuevos máximos en casi dos años. El barril de Brent superó la barrera de los US$73, algo que no pasaba desde el 31 de octubre de 2018, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) se cotizó en US$71, un nivel alcanzado en hace más de dos años.
La buena racha del petróleo se explica por el aumento de la demanda. “Hay una fuerte recuperación de la demanda mundial, superior a la esperada por el mercado, jalonada principalmente por las dos economías más grande del mundo: Estados Unidos y China. Hemos visto una normalización del crecimiento económico: el año pasado la economía china creció y, con la rápida vacunación en Estados Unidos y las menores restricciones, todo se ha dado para una presión al alza del petróleo”, explicó Omar Suárez, analista de inversiones de Casa de Bolsa.
En línea con esto, el anuncio de la Agencia Internacional de la Energía (IEA por sus siglas en inglés) alentó los mercados. “La subida de ayer se da por el anuncio del organismo de que la demanda de petróleo a finales de año va a alcanzar más de 100 millones de barriles diarios, llegando a niveles prepandemia. Esto le exige a Arabia Saudita y a Rusia producir más”, expresó Felipe Campos, director de investigaciones de Alianza Fiduciaria.
La especulación también ha jugado un papel importante. Esta semana, el banco de inversión estadounidense Goldman Sachs anunció que espera que los precios del barril de Brent alcancen US$80 este verano boreal, lo que inmediatamente tuvo una reacción positiva en el mercado, pues los inversionistas, contrario a lo que había pasado al inicio de la semana, decidieron apostar aún más por el hidrocarburo y no recurrir a la toma de utilidades.
“No hay duda de que la mayoría de los titulares sobre el petróleo han sido optimistas, pues ambos índices de referencia han extendido sus ganancias y están en camino de registrar utilidades de alrededor de 1% esta semana, el tercer aumento semanal consecutivo. Una mejora en las perspectivas de la demanda, en medio de programas de vacunas exitosos y el aumento del consumo a medida que las economías se reabren, ha impulsado los precios del petróleo 10% durante las últimas tres semanas”, expresó Sophie Griffiths, analista senior de mercados en Oanda.
La participación de Irán en el mercado petrolero aún es incierta, pues las negociaciones continúan. Sin embargo, la analista de Oanda afirmó que la recuperación de la demanda de crudo se ve tan fuerte que, incluso, si la producción de Irán ve un retorno adicional de 500.000 barriles por día para el tercer trimestre del año, la referencia extraída del Mar del Norte podría superar los US$80 para fin de año. Esto ya ha sido reafirmado por funcionarios estadounidenses, por lo cual el mercado no le teme a un posible incremento de la oferta de barriles y, por el contrario, aprovechará la oportunidad de crecimiento de la demanda mientras la situación de Irán no esté definida.
Aunque no se ha descartado, Goldman Sachs no volvió a hablar de la posibilidad de un barril de petróleo a US$100 este año.
Brent le aportó al país US$2.756 millones
Según un estudio realizado este año por la Dirección de Política Macroeconómica del Ministerio de Hacienda, por cada dólar que sube el barril de petróleo Brent, al Estado entran US$130 millones ($465.000 millones). El barril de esa referencia estaba a US$51,80 el 1 de enero y ayer llegó a los US$73, lo que representa un alza de US$21,2. Eso significa que en lo corrido del año, el hidrocarburo del Mar del Norte le ha aportado a la economía colombiana unos US$2.756 millones adicionales. Los analistas esperan que el barril siga subiendo, lo que se traduce en mayores ganancias para el Estado colombiano.
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