Tras varios años de negociaciones, el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Colombia e Israel entró en vigor el pasado 11 de agosto. En Israel no solo hay una población con alto poder adquisitivo, sino oportunidades para bienes industriales y agroindustriales.
Con este acuerdo Colombia e Israel buscan incrementar los flujos comerciales (productos y servicios) y de inversión, impulsar la cooperación económica bilateral, la remoción de las barreras arancelarias y fomentar la innovación.
El TLC con Israel permitirá un acceso preferencial a este mercado y un consecuente incremento en el comercio como resultado de la reducción en los costos de transacción y del mejoramiento en los procedimientos aduaneros.
Para Colombia el TLC se presenta como la oportunidad de impulsar la innovación e incrementar el nivel tecnologico de la mano de uno de los países que se ha transformado a partir de la tecnología, así como del emprendimiento, estrategias que hacen parte fundamental de la política de desarrollo del actual Gobierno Colombiano.
Uno de los objetivos de este Acuerdo es fortalecer sectores y tecnologías tales como agrotech, ciberseguridad, healthtech, edutech y fintech, entre otros, así como generar conexiones de valor que permitan potenciar los emprendimientos colombianos de alto impacto y apoyar las exportaciones de Colombia al mundo con tecnologías.
Israel es una economía de más de 9 millones de habitantes y una capacidad adquisitiva considerablemente mayor a la colombiana, que alcanza un PIB per cápita de 42.823 dólares anuales (similar, per capita, a Francia y Reino Unido).