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Los activos argentinos parecían abocados a nuevas pérdidas el lunes, tras la inesperada victoria en las primarias de un candidato populista
Los inversores de los mercados emergentes se enfrentaron el lunes a una creciente lista de desafíos que van desde un giro populista en las preferencias de los votantes argentinos a los inminentes impagos de deuda en China y una rara crítica del gobierno al banco central de Rusia.
El índice de referencia MSCI Inc. cotizaba cerca de su mínimo en cinco semanas y su homólogo en divisas en su nivel más bajo desde marzo, lo que refleja el nerviosismo de los inversores ante la posibilidad de que los riesgos específicos de cada país se sumen al endurecimiento de las condiciones monetarias mundiales para socavar las perspectivas de los países en desarrollo.
Los activos argentinos parecían abocados a nuevas pérdidas el lunes, tras la inesperada victoria en las primarias de un candidato populista. La deuda en dólares del país lideró las caídas en los mercados emergentes, mientras que un fondo cotizado estadounidense que invierte en acciones argentinas cayó en las operaciones previas al mercado de Nueva York.
El temprano éxito de Javier Milei supone un rechazo a la actual clase política, que ha sometido al país a años de penurias económicas y una inflación galopante. El poco conocido diputado se identifica como libertario y apoya la dolarización de la economía.
Los crecientes riesgos políticos en América Latina empeoran el sentimiento, ya deteriorado por el pinchazo de la economía china. Justo cuando los mercados emergentes esperaban unas condiciones financieras más favorables a medida que el ciclo de subidas de los tipos de interés se acerca a su fin, los riesgos de un mayor contagio del desplome inmobiliario del país agravaron los decepcionantes datos económicos de la semana pasada.
Los informes que mostraban que el azote de los impagos de la deuda se ha extendido ahora a la gestión de patrimonios también empañaron el fin de semana para los operadores.
El yuan cayó a su nivel más bajo desde noviembre y las acciones chinas registraron las mayores pérdidas consecutivas desde abril. El rublo ruso se desplomó por encima de los 100 por dólar, en una señal de cómo las sanciones internacionales están ahogando la economía rusa. El dólar no hizo mucho el lunes, pero la mayoría de las divisas emergentes asiáticas cayeron frente a él, mientras el yuan se acercaba a su mínimo de 2023.
En las primeras horas de la sesión europea, una columna de la agencia estatal rusa Tass apuntó contra el banco central, en un inusual ataque del Kremlin a sus políticas.
Maxim Oreshkin, asesor del presidente Vladimir Putin, culpó a la política monetaria "blanda" de la caída del rublo y afirmó que una moneda fuerte es esencial para el país. Esto contradice la tesis del banco central de que el empeoramiento de las condiciones comerciales es el culpable de la caída del rublo.
La moneda rusa es la tercera divisa emergente con peor comportamiento en lo que va de año, con sólo dos divisas en peor situación, la lira turca y el peso argentino, ambas constantemente en el punto de mira de los políticos.
Los activos brasileños estuvieron en el punto de mira después de que los datos mostraran que la economía terminó la primera mitad del año mejor de lo esperado, según el índice de actividad del banco central.
Mientras tanto, Arabia Saudí buscaba reforzar su mercado de deuda nacional emitiendo títulos conformes con la normativa islámica por casi 36.000 millones de riyales (US$9.600 millones).
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