Así son los programas económicos que proponen Bolsonaro y Haddad para Brasil

El exmilitar Bolsonaro ha creado controversia en todo el mundo por un discurso autoritario irrigado de racismo, homofobia, misoginia y en defensa de la dictadura. Pero también se ha granjeado una victoria electoral en la primera vuelta, hace 20 días, y el 57% del apoyo electoral, según la última encuesta.

Su rival Haddad reencarna el tardío plan B del PT, que esperó hasta el último momento para presentar su candidatura, después de que la Corte Electoral de Brasil rechazara, a sólo un mes de las elecciones, que el expresidente y candidato Lula da Silva concurriera en campaña, por estar actualmente en prisión.

Con un 43% de los votos, (dos puntos más, que le arrebató a Bolsonaro en la última encuesta), Haddad se enfrenta a un amplio movimiento antipetista que castiga por los graves escándalos de corrupción de la operación Lava jato.

El escenario de concurrencia apunta a que será en las últimas horas de estos días cuando se decida hacia qué lado se inclina la balanza.

Aunque los candidatos apenas han desgranado las claves económicas de sus programas, sus propuestas encarnan antítesis del otro. Bolsonaro, aupado por el gurú económico Paulo Guedes, presenta un plan liberal que tranquiliza a los mercados.

Haddad, por su parte, propone un programa de izquierdas, menos ortodoxo en la consolidación fiscal y la reducción del gasto.

Gasto público
Bolsonaro propone en su programa reducir la deuda pública un 20% a través de privatizaciones -aproximadamente unas 50 empresas-, concesiones y venta de propiedades públicas. Su objetivo es eliminar el déficit público primario el primer año y convertirlo en superávit en el segundo. Dentro de su política de reducción de gasto, propone reducir el número de ministerios y unificar los de Hacienda, Planeamiento e Industria y Comercio en un superministerio de Economía bajo el mando de Guedes. Haddad, por su parte, promete interrumpir las privatizaciones y revocar medidas del Gobierno de Michel Temer, como la congelación del gasto público.

Reforma de las pensiones
Los dos candidatos afrontan de forma diferente la necesaria reforma de las pensiones. Bolsonaro habla de crear un sistema de jubilación por capitalización, similar al existente en Chile. Haddad prefiere centrarse en medidas contra la evasión fiscal y políticas activas de empleo para equilibrar las cuentas del sistema.

Mercado laboral
Bolsonaro aboga por mayor flexibilidad en el mercado laboral, en una línea continuísta o incluso más extrema de la reforma del mercado de trabajo efectuada por Michel Temer. Haddad, por su parte, quiere revocar esta reforma y subir el salario de los empleados con la inflación.

Fiscalidad
Bolsonaro se muestra contrario a incrementar los tipos a grandes fortunas, herencias y empresas. Sin embargo, no concreta más que señalando que "los que pagan mucho paguen menos y que quienes evaden paguen más". Aunque defiende la austeridad fiscal, Bolsonaro pretende complementar las rentas con un sistema de renta negativa dirigido a una "renta mínima para todas las familias brasileñas". Haddad promete eximir del impuesto a la renta a quienes ganen menos de cinco salarios mínimos y crear franjas de contribución mayores para los más ricos. También propone medidas fiscales para grandes transacciones financieras, una reforma bancaria con impuestos al reparto de dividendos y grandes patrimonios, y unificar diversos impuestos en un IVA.

Política exterior
Reducir los tipos para las importaciones y las barreras no arancelarias son las principales medidas que propone Bolsonaro, que quiere dar protagonismo a Brasil -"hacer a Brasil grande"- como país, mediante acuerdos bilaterales, sin mencionar Mercosur en su programa. Por su parte, Haddad visa fortalecer alianzas como Mercosur, Brics y el Foro de Diálogo de India, Brasil y África del Sur, aunque no hace referencia a barreras tarifarias.