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Los precios de los productos de gran consumo siguen subiendo, pero a menor ritmo.
Sería resultado de una muestra brusca de la desaceleración de la inflación que debería acentuarse más aún en los próximos meses
Nestlé, PepsiCo, Coca-Cola, Unilever o P&G siguen subiendo tarifas, pero al nivel más bajo en dos años y, en general, por debajo del doble dígito. La moderación es menos intensa en Europa.
Los precios de los productos de gran consumo siguen subiendo, pero los últimos dos trimestres del año lo han hecho a mucha menos velocidad -especialmente entre julio y septiembre-, lo que muestra ya una brusca desaceleración de la inflación que debería acentuarse más aún en los próximos meses, según muestran las últimas cuentas de Nestlé, PepsiCo, P&G, Unilever, Coca-Cola, Danone o General Mills.
"Esperamos unos vientos de cola de alrededor de US$800 millones para el ejercicio fiscal 2024 debido a unas condiciones más favorables en el coste de los productos básicos", ha señalado P&G, el dueño de Ariel, Dodot o H&S en sus resultados del primer trimestre (de julio a septiembre) de su ejercicio.
"El entorno muestra una inflación más moderada, una estabilización de las cadenas de suministro y un consumidor resiliente, aunque cauteloso", indica General Mills, con marcas como Häagen Dazs, Old El Paso o Gigante Verde. "Las subidas de precio seguirán moderándose", sentencia Unilever, dueña de Dove, Knorr o Magnum.
Las cuentas de las compañías que marcan el paso del sector de gran consumo hablan por sí solos. Tras dos años de espiral inflacionista en los que los precios no han dejado de subir, el primer trimestre de este año mostró una estabilidad en las tarifas y, desde entonces, se ha producido una desaceleración cada vez es más pronunciada.
No significa que los precios ya no suban, porque lo siguen haciendo. Ni que los retos hayan desaparecido, porque las tasas siguen siendo elevadas, sobre todo porque comparan con un periodo en el que las alzas eran de doble dígito. Pero se atisba un respiro, que el pico de la inflación ha pasado y que el horizonte apunta a una mayor estabilidad.
Nestlé, la mayor empresa de alimentación del mundo, con marcas como Nespresso, Maggi o Nesquick, ha crecido en los nueve primeros meses del año un 7,8% de forma orgánica, tras elevar sus precios un 8,4% y reducir sus ventas en volumen 0,6 puntos.
No obstante, la evolución de sus precios ha cambiado drásticamente. El grupo suizo subió sus tarifas un 10,1% en el cuarto trimestre de 2022 y, desde entonces, sus precios han subido a mucho menor ritmo. El alza fue del 9,8% entre enero y marzo; se redujo al 9,1% entre abril y junio; y ha frenado bruscamente hasta el 6,3% entre julio y septiembre, en lo que supone su menor tasa de subida desde el primer trimestre de 2022 (+5,2%).
"Continuamos navegando por niveles históricos de inflación", señaló hace unos días Mark Schneider, CEO de Nestlé. Pero añadió dos reflexiones que suponen un cambio: "La recuperación de nuestros volúmenes y mix de ventas está en marcha" y, sobre todo, "esperamos que se conviertan en el principal motor del crecimiento en la parte final del año".
Aunque mantiene niveles de inflación más elevados que Nestlé, PepsiCo es otra de las empresas que han mostrado ya un cambio de tendencia. Las alzas de precios del dueño de Pepsi o Lay's se estabilizaron en la primera mitad del año (+16% y +15%), mientras que en el tercer trimestre sus tarifas han crecido cuatro puntos menos (+11%), lo que supone su nivel de crecimiento más bajo desde el primer trimestre de 2022 (+10%).
"Seguimos con el foco puesto en las iniciativas de gestión de costes", indicó Ramón Laguarta, CEO de PepsiCo, al presentar los últimos resultados del grupo. Además, añadió que "vemos una mejora gradual de los volúmenes".
Unilever presentó el pasado jueves sus resultados del tercer trimestre, en el que sus ventas orgánicas -descontando el efecto de divisa y operaciones corporativas- crecieron un 5,2%, hasta 15.200 millones. Las subidas de precios aportaron 5,8 puntos de crecimiento y la caída en volumen le restó 0,6 puntos.
Se trata del menor ascenso de precios del grupo desde el cuarto trimestre de 2021, pero además la cifra supone casi la mitad del 10,7% que subieron sus tarifas en el primer trimestre de este año y una cifra notablemente inferior al 8,2% del segundo trimestre.
P&G ha iniciado su ejercicio 2024 -de julio a septiembre- con un crecimiento de ventas del 6%, tras elevar los precios un 7% y reducir las ventas en volumen un 1%. Se trata del segundo trimestre consecutivo en el que sus precios suben un 7%, frente al alza del 10% de los dos trimestres anteriores. Aunque sus volúmenes siguen siendo negativos, la bajada de un punto en el último trimestre está muy lejos de la situación vivida el año pasado, cuando el grupo llegó a registrar descensos de sus ventas en volumen de hasta seis puntos en algunos trimestres.
Algo parecido le ha pasado a General Mills. Sus ventas crecieron un 4% en el primer trimestre de su ejercicio, finalizado en agosto, tras elevar un 6% sus precios y ceder dos puntos en volumen. En su caso, el incremento del 6% en las tarifas supone la menor subida que realiza la compañía en siete trimestres y la primera vez en la que su alza de precios es inferior a dos dígitos desde finales de 2021.
Esa contención de subidas también ha tenido un efecto positivo sobre sus volúmenes. Aunque han bajado dos puntos, supone un descenso mucho más limitado que el registrado en varios trimestres del año pasado, cuando llegó a tener descensos de 12 puntos.
Coca-Cola también está desacelerando sus subidas de precios, pero de una forma más moderada. Su incremento del 9% en el último trimestre es sólo un punto menos que en el anterior (+10%) y dos puntos respecto al inicio de año (+11%), aunque suponga la menor subida desde el primer trimestre de 2022 (+7%). En su caso, se debe a que sus volúmenes no sólo no caen, sino que están subiendo -dos puntos en el último trimestre-.
Otras multinacionales también han mostrado una moderación en sus incrementos de precios. Danone ha cerrado un tercer trimestre de 2023 con volúmenes casi planos, tras subir sus precios un 6,6%, frente al 8,7% del segundo trimestre y el 10,3% de los tres primeros meses del año.
Kraft Heinz subió precios un 11% en el segundo trimestre, su menor incremento en un año y medio, y Heineken indicó que "los precios se empiezan a moderar, mientras los volúmenes mejoran".
Aunque la moderación de las subidas de precios es una tendencia general, tiene una singularidad que hace que en mercados como España no se aprecie con la misma intensidad: Europa presenta unos niveles de inflación muy superiores a los de otras regiones.
Los precios de Coca-Cola han subido un 9% en el último trimestre, pero lo han hecho un 19% en EMEA (Europa, Oriente Medio y África), frente a un 1% en Asia o un 5% en Norteamérica. Europa también es el continente con la inflación más alta en el caso de Nestlé o PepsiCo, lo que anticipa que los consumidores del continente, incluidos los españoles, tardarán en notar el cambio de tendencia.
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