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Según las entidades con estas medidas intentan recortar costos, hacer frente a la ralentización de la economía y adaptarse a la tecnología.
Los bancos de todo el mundo han anunciado que acometerán la mayor oleada de despidos de los últimos cuatro años en su intento de recortar costes para hacer frente a una ralentización de la economía y adaptarse a las nuevas tecnologías.
Este año más de 50 entidades han anunciado sus planes de recortar un total de 77.780 puestos de trabajo, la mayor cantidad de despidos desde los 91.448 en 2015, según datos de los sindicatos. Los bancos de Europa, que se enfrentan además a la carga añadida de los tipos negativos, representan casi el 82% del total.
Los despidos de 2019 hacen que la cifra total de los últimos seis años supere los 425.000. De hecho, la cantidad real podría ser incluso mayor, dado que muchos bancos realizan despidos sin anunciarlo.
Según fuentes del entorno, Morgan Stanley despedirá aproximadamente a 1.500 empleados. El consejero delegado del banco, James Gorman, ha anunciado que los recortes ascienden al 2% de la plantilla del banco. Las cifras de este año también ponen de manifiesto la delicada situación de las entidades europeas mientras la economía de la región, orientada a las exportaciones, hace frente a las consecuencias derivadas de la guerra comercial y a los tipos de interés negativos.
A diferencia de EEUU, donde los programas de la Administración y el aumento de los tipos han ayudado a los bancos a superar con más rapidez la crisis financiera, las entidades europeas siguen intentando recuperar el terreno perdido. Ante esta situación, muchos bancos recurren a los despidos y a la venta de las divisiones menos rentables.
El primer banco de Alemania encabeza la lista de despidos. De hecho, Deutsche Bank ha anunciado que prescindirá de 18.000 empleados de aquí a 2022 coincidiendo con los recortes de su división de banca de inversión.
Alemania es el mercado de banca más fragmentado de Europa y está entre los más expuestos a los tipos de interés negativos porque sus entidades crediticias tienen más depósitos que sus competidores extranjeros. Los bancos seguramente seguirán anunciando despidos el año que viene.
La gestora suiza Julius Baer se está planteando recortes ante el aumento de la competencia y la caída de los márgenes. Y el español BBVA introducirá despidos en su negocio de soluciones al cliente que podrían acabar afectando al resto del banco.
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