MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
El declive estadounidense del tercer trimestre fue de 1%, aunque fue inferior a la caída de 8% ocurrido en el segundo trimestre
Los ingresos reales de los hogares en el área de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde) aumentaron solo 0,2% durante el tercer trimestre de 2021 respecto al trimestre anterior, lastrados fundamentalmente por la caída de 1% en Estados Unidos.
De acuerdo con datos de la organización, el descenso del 1% en EE.UU. entre julio y septiembre del año pasado fue mucho menor que en el segundo trimestre, cuando la renta per cápita de los hogares cayó 8% intertrimestral.
Las dos caídas consecutivas en los ingresos estadounidenses se dieron tras un fuerte repunte de 11,2% en los primeros tres meses de 2021, debido a las transferencias monetarias a los hogares relacionadas con la ayuda implementada por el Gobierno por la pandemia.
A pesar de estos dos trimestres consecutivos registrando caídas, el ingreso real per cápita de los hogares en Estados Unidos fue 5,6% superior en el tercer trimestre de 2021 que antes de que iniciara la pandemia.
Según la Ocde, esto representa el segundo aumento más alto entre las economías del G7, detrás de Canadá con 7,9% .
A propósito de las siete principales economías del mundo, los países de este grupo que registraron mayores incrementos del ingreso familiar real per cápita en el periodo estudiado fueron Alemania e Italia, con crecimiento de 1,1% y 1%, respectivamente.
De acuerdo con el informe de la organización, el nivel de ingresos per cápita de los hogares en el área de la Ocde está ya 4% arriba del nivel que se registraba previo a la pandemia de covid-19 durante el cuarto trimestre de 2019.
En cuanto a otros países del club de países con buenas prácticas, se registró un fuerte crecimiento en el ingreso familiar en Austria, con un incremento de 8,6%. Un aumento parecido se vio en Grecia, en donde se registró 5,0% más en los ingresos de los hogares. Mientras que en Australia hubo un crecimiento de 4,4% en los ingresos familiares per cápita.
Otras naciones que reportaron subidas considerables en este rubro fueron Polonia, con un aumento de 3,7% en el tercer trimestre del año pasado, y Países Bajos, en donde los hogares tuvieron ingresos 3% al segundo trimestre.
Por su parte, el Reino Unido registró un aumento más modesto, de 0,4%, pero positivo, teniendo en cuenta que llegaba de dos caídas trimestrales consecutivas en los ingresos de los hogares.
Sin embargo, debido a los altos índices de inflación en el país británico, como es usual en la mayoría de países en el mundo, los trabajadores más pobres necesitan mayores incrementos salariales para superar la crisis del nivel de vida que se está viviendo en la actualidad.
Un análisis del Instituto Tony Blair para el Cambio Global muestra que la quinta parte más pobre de los trabajadores del Reino Unido necesitará un aumento salarial de más del 10% para compensar el impacto en sus ingresos.
“Los ingresos de los hogares se enfrentan a un shock en abril. Desde el verano, un aumento sin precedentes en los costos de la energía combinado con un aumento de la inflación más amplia ha provocado que las perspectivas del nivel de vida se deterioren drásticamente, especialmente para las familias de bajos ingresos para quienes los costos de la energía representan una parte importante del gasto semanal”, asegura Ian Mulheirn, economista jefe del Instituto para el Cambio Global, quien agregó que puede ser un fenómeno que se viva en muchos países a nivel global.
Este tipo de efectos suelen potenciarse en las economías emergentes y en desarrollo, como es el caso de América Latina.
Según la Ocde, el ingreso real per cápita de los hogares cayó en Chile 11,7 % luego de completar la tercera cuota de retiros de pensiones en el marco de la política gubernamental para compensar las pérdidas de ingresos durante la pandemia.
“En América Latina y el Caribe la pandemia tuvo un impacto más severo por causa de ‘comorbilidades sociales’, como informalidad y desigualdad. Cuando comenzó la crisis contribuyeron a la pérdida de empleos y de ingresos, sin regímenes de protección social adecuados para sostener a las personas en un momento tan difícil”, explicó Vinícius Pinheiro, director de la Organización Internacional del Trabajo para América Latina y el Caribe.
Pinheiro, de la OIT, agregó que “tras el inicio de la pandemia, la crisis se manifestó de manera atípica y en vez de afectar más a las ocupaciones formales se reflejó en una pérdida mayor de empleos en informalidad que dejaron a millones de personas sin ingresos”.
Cabe resaltar que aunque los datos trimestrales sobre el gasto de consumo final de los hogares y las instituciones están disponibles para todos los países que hacen parte de la Ocde, la organización no compiló los datos sobre el ingreso disponible bruto de los hogares de algunas naciones como Colombia, Costa Rica, Dinamarca, entre otros.
El ingreso real per cápita de los hogares es un indicador de bienestar material que utiliza la Ocde para evaluar el dinero que llega de forma efectiva a las familias que habitan los países miembros de la organización, después de deducir los impuestos y cotizaciones sociales que tienen que pagar y de integrar las prestaciones sociales que reciben.
PIB per cápita en la Ocde superó su nivel prepandemia por primera vez
La Ocde comparó el aumento de 0,2 % en el ingreso familiar real per cápita en el tercer trimestre de 2021 con el incremento de 1% en el PIB per cápita. Dice que este indicador ha seguido creciendo desde su punto más bajo en el segundo trimestre de 2020, con un gran aumento en el tercer trimestre, seguido de aumentos más moderados pero constantes durante los últimos cuatro periodos similares. De este modo, el PIB per cápita en la Ocde superó por primera vez su nivel previo a la pandemia, aunque apenas en 0,1 %.
Los abogados explican que muchos ejecutivos extranjeros se trasladaron a vivir a España con sus familias con la Ley Beckham
Desde el día de las elecciones, se han disparado 73%, lo que las sitúa en 69% para 2024. Esto significa que, en menos de dos meses
Entre los posibles compradores figuran empresas de capital riesgo y grandes proveedores de tecnología financiera