"Hoy, la jubilación es una propuesta mucho más difícil de lo que era hace 30 años"

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El CEO de BlackRock, Larry Fink, como es costumbre, publicó su carta anual para los inversionistas, en ella habló de la crisis de jubilación que atravesarán las nuevas generaciones, teniendo en cuenta que la esperanza de vida es más larga y para sostener esta vejez se necesitará más dinero. “Centramos una enorme cantidad de energía en ayudar a las personas a vivir una vida más larga. Pero ni siquiera una fracción de ese esfuerzo se dedica a ayudar a las personas a pagar esos años adicionales”, dijo Fink.

Haciendo una comparativa con la historia de vida de sus padres, y la de él mismo, señaló que “la jubilación es una propuesta mucho más difícil que hace 30 años”, por lo cual señala que se debe cambiar la concepción de la jubilación, por ejemplo, en términos de repensar la edad promedio de salida del mundo laboral. “¿Cuál es la solución aquí? Nadie debería tener que trabajar más tiempo del que desea. Pero sí creo que es un poco loco que nuestra idea principal sobre la edad de jubilación adecuada (65 años) se origine en la época del Imperio Otomano”, dijo.

El CEO del administrador de activos más grande del mundo dijo que en sus 50 años trabajando en finanzas no había cifra que le preocupara más que una entregada por The Wall Street Journal en su artículo ’Los años difíciles que convirtieron a la Generación Z en los votantes más desilusionados de Estados Unidos’, y esta es que, cuatro de cada 10 jóvenes estadounidenses dicen que es difícil tener esperanza en el mundo. “Los jóvenes han perdido la confianza en las generaciones mayores. La carga de recuperarlo recae sobre nosotros. Y tal vez invertir para sus objetivos a largo plazo, incluida la jubilación, no sea un mal punto de partida”.

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En este sentido, hace un llamado a inversionistas, jubilados, formuladores de políticas y otros actores de la generación de baby boomers, a la que pertenece, para generar cambios de alto nivel que le permitan a los millennials y a los centennials vivir sus últimos años de vida con dignidad; por lo que le solicita a los gobiernos priorizar la construcción de mercados de capitales sólidos como el que tiene Estados Unidos, aunque deja claro que el sistema pensional de este país necesita una modernización, e identifica que uno de los problemas del mismo es que sea asequible, “¿quién va a invertir para una jubilación en 30 años si no tiene efectivo para hoy?”, cuestiona, y sugiere potenciar los ahorros líquidos, y que sea más automática la inversión en el retiro para los trabajadores, por ejemplo, con la inscripción de los empleadores a sus contratados en estos planes de ahorro.

Fink señala que hay dos desafíos para mediados del siglo XXI, el primero es el ya mencionado de brindar a las personas una jubilación segura y bien merecida, y para ello, los mercados de capital pueden proporcionar dinero, con el apoyo de que los gobiernos y las empresas ayudando a la gente para invertir.

Jairo Uribe, CEO de Planeación Financiera, destaca que el enfocar la carta de BlackRock en la jubilación muestra conciencia y responsabilidad social, y al igual que esta entidad, los gobiernos deben comunicar que cada persona tiene que construir su retiro.

Juan David Ballén, director de análisis de Casa de Bolsa, coincide en que el aumento de la esperanza de vida y la reducción en la tasa de natalidad hará insostenible las pensiones basados en sistemas de reparto. “Será determinante que se implemente un sistema de capitalización que sea complementado con un aumento en la edad de jubilación, la formalización laboral, y nivel de ahorro”.

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El segundo desafío económico que Fink plantea es construir una enorme cantidad de infraestructura que el mundo está demandado, y transformar la antigua en países desarrollados. “Nunca he visto tanta demanda de infraestructura energética como ahora”, dijo, señalando el sector que requiere mayor inversión en medio del proceso de transición energética que atraviesa a escala global. Y al reto de descarbonizar a la par que se mantiene la seguridad en el suministro se le ha denominado “pragmatismo energético” explicó el CEO.