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La multinacional está diversificando sus operaciones en China luego que se afectó la operación allí una vez pasó la pandemia
El CEO de Apple, Tim Cook, llegó a China el miércoles promocionando la importancia del país como mercado y base de producción, acercándose a los consumidores chinos que son clave para sus resultados globales.
No hay cadena de suministro en el mundo más crítica para la empresa que la de China, dijo Cook al Global Times en una entrevista tuiteada por el periódico. Apple ha estado ampliando su base en el país y aumentando la inversión durante los últimos 30 años, añadió.
Los comentarios de Cook, antes del lanzamiento el jueves de la octava tienda de Apple en Shanghái, se producen cuando la relación "simbiótica" entre la compañía y China, como una vez la describió, está mostrando signos de desgaste.
Anclada por Foxconn, o Hon Hai Precision Industry, la presencia manufacturera de Apple en China ha sido amplia e inquebrantable durante más de dos décadas. Pero la compañía ha sufrido problemas en la producción en los últimos años debido a una guerra comercial entre Estados Unidos y China y al cierre de fábricas provocado por el covid-19, lo que retrasó los lanzamientos de productos.
Apple ahora está diversificando sus operaciones fuera de China trabajando con socios de ensamblaje y fabricación de componentes en India, Tailandia, Malasia y otros lugares.
Las ventas de teléfonos se desplomaron 24% durante las primeras seis semanas de este año, según la firma de investigación Counterpoint. Apple ha estado perdiendo participación de mercado frente a Huawei Technologies, sancionada por Estados Unidos, que se ha beneficiado de una ola de compras patrióticas para sus dispositivos locales Mate 60 Pro.
La próxima tienda en Shanghái se suma a la mayor red minorista de Apple fuera de Estados Unidos y es parte de un esfuerzo más amplio para hacer crecer y revitalizar los puntos de venta tradicionales de la compañía. China sigue siendo un mercado vital para la empresa con la base de consumidores de teléfonos inteligentes más grande del mundo y potencial para aumentar las ventas de accesorios como el Apple Watch.
El aparente voto de confianza de Apple a China no es menos importante para el gobierno de Xi Jinping. Con la desaceleración de la economía, la caída de la nueva inversión extranjera directa y las multinacionales mirando a otros mercados para crecer, es importante mostrar al mundo que China todavía está abierta a los negocios a raíz de las medidas enérgicas regulatorias y las preocupaciones de seguridad nacional que han asustado a los inversores extranjeros.
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