MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
El caso chileno, que tiene una deuda externa per cápita de US$8.734 (ver gráfico), se explica porque allí “no solamente se endeudan para lo social, sino también para inversión en empresas. Esa inversión probablemente tenga un mayor volumen por persona y eso permite esperar un pago de esa deuda”, dijo Carlos Fernando Martínez, profesor y coordinador del área económica de la Universidad Politécnico Grancolombiano.
Un ejemplo de esto es la decisión del gobierno de Michelle Bachelet de implementar un programa de gratuidad en la educación superior, que ha recibido mucha presión para que se haga con mayor celeridad. Frente a “los programas sociales que viene asumiendo el gobierno de Bachelet la única solución es endeudarse”, agregó Germán Nova, profesor investigador de la Universidad Nacional y de la Universidad Central.
Según los expertos, la deuda externa no ha sido bien manejada por los países latinoamericanos. Esto porque “fueron países con buenos ingresos en general, pero se embarcaron en grandes gastos, que mientras había ingresos se podía financiar, pero cuando caen se deben reducir”, indicó Nova, quien agregó que “la única forma de mantenerlos es endeudarse”.
Por su parte, Uruguay se ha caracterizado por tener uno de los “mejores indicadores sociales”, dijo el profesor de la Universidad Nacional. Esto porque el país debe asumir una gran deuda para sostener el gasto social que se representa en educación, salud y vivienda.
Este país tiene una deuda per cápita de US$6.168, en donde incide el poco número de habitantes que tiene frente a otros países de la región. Para Martínez, este puede ser “un caso atípico en la medida en que probablemente no se repite su baja cantidad de población”.
Los expertos concluyeron que en el caso colombiano (US$2.256 per cápita) la capacidad de pago de la deuda se ha visto disminuida por el bajo crecimiento en la economía. Una explicación de esto, según Nova, es que, tanto para el país como para la región, con una economía con menos dinamismo y un dólar más fuerte es difícil controlar el gasto público.
Cae la bonanza y también el petróleo
La caída en los precios del petróleo ha afectado a varios países latinoamericanos, entre ellos Colombia, Brasil y Venezuela, cuya fortaleza económica se debió en gran parte al repunte del crudo en 2014, cuando el Brent llegó a un valor cercano de US$115 por barril. Según los expertos consultados, en el caso de Venezuela los buenos precios del petróleo ayudaron a sus ingresos pero al caer el Gobierno no tiene forma de mantener el gasto social, lo que ha incurrido en la presión de los últimos años y en el déficit económico.
Las opiniones
Germán Nova
Profesor investigador Universidad Nacional y Universidad Central
”Las economías de Latinoamérica dejaron escapar una oportunidad fabulosa de buenos ingresos porque no hubo cultura del ahorro y hoy es difícil controlar el gasto público”.
Carlos Fernando Martínez
Profesor y coordinador área económica Politécnico Grancolombiano
”Tenemos una capacidad alta de endeudamiento per cápita pero no lo aprovechamos, por algún motivo los colombianos no quieren endeudarse al tope”.
Las iniciativas apuntan a aprovechar el reciente aumento de las entradas de dólares derivadas de la amnistía fiscal del gobierno
La decisión exime a todos los países con los que México tiene acuerdos de libre comercio, como es el caso de Estados Unidos y Canadá
Carlos Ghosn, ex presidente del fabricante de automóviles japonés dijo que es una "decisión desesperada”