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El nuevo director, Pan Gongsheng, asumirá el cargo luego de que su antecesor llegara a la edad oficial de jubilación a los 65 años
China nombró a Pan Gongsheng gobernador del Banco Central, reforzando así su posición al frente de la institución encargada de impulsar la segunda economía mundial.
Pan, de 60 años, fue nombrado el martes por el Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional, en sustitución de Yi Gang, que ha alcanzado la edad oficial de jubilación de 65 años para los funcionarios de nivel ministerial, según los medios estatales. Pan, antiguo adjunto del Banco Popular de China, ya había sido nombrado secretario del Partido Comunista en el PBOC a principios de julio, lo que le sitúa en uno de los dos puestos más altos del banco.
Pan es un veterano banquero central. Se incorporó al Pboc en 2012 tras ocupar altos cargos en bancos estatales como Industrial and Commercial Bank of China Ltd. y Agricultural Bank of China Ltd., entre otros. Su ascenso a la cúpula del Pboc indica que Pekín está dando prioridad a la continuidad de las políticas en un momento en el que la recuperación económica está perdiendo impulso y los funcionarios están lidiando con diversas formas de impulsar la confianza.
Desde su nombramiento como secretario de partido en el Pboc, Pan ha mantenido varias reuniones con banqueros centrales visitantes, entre ellos el surcoreano Rhee Chang-yong, y asistió en julio a una conferencia de gobernadores de bancos centrales entre China, Japón y Corea del Sur. La secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, se refirió a Pan como "gobernador en funciones" cuando se reunió con él durante su viaje a Pekín recientemente.
Su nombramiento marca la primera vez desde 2018 que los dos principales cargos en el PBOC -gobernador y secretario del Partido Comunista- serán ocupados por una sola persona, lo que potencialmente agilizará la toma de decisiones en la parte superior. El exgobernador Zhou Xiaochuan ocupó ambos puestos hasta su marcha en 2018, cuando Yi Gang fue nombrado gobernador y Guo Shuqing ocupó el cargo de jefe del partido.
Pan abandonó el elitista Comité Central del Partido Comunista a finales del año pasado, lo que algunos analistas consideraron en su momento una señal de su salida. Sin ese alto cargo en el partido, existen dudas sobre la influencia del banco central, dado el creciente control del Partido Comunista sobre el sector financiero bajo la presidencia de Xi Jinping.
A diferencia de la Reserva Federal estadounidense y de los bancos centrales europeos, el PBOC no es independiente. Responde ante el Consejo de Estado, el gabinete chino dirigido por el primer ministro Li Qiang, y necesita aprobación antes de tomar decisiones políticas importantes, como fijar los tipos de interés o gestionar la moneda.
Además de vicegobernador, Pan dirigía desde 2016 la Administración Estatal de Divisas, el regulador que supervisa los US$3 billones en reservas de divisas del país. Esa experiencia le vendrá muy bien en un momento en el que el Pboc trata de estabilizar la divisa en medio de una mayor incertidumbre de los inversores. El yuan ha perdido casi un 4% frente al dólar este año, uno de los peores resultados de Asia.
Una de las principales prioridades de Pan será dirigir la economía a través de su actual desaceleración, que está afectando a los mercados financieros y preocupando a las empresas. Los inversores claman por más estímulos monetarios desde la bajada de tipos de interés de junio, aunque el banco central de Yi ha adoptado un enfoque prudente, centrado en frenar los riesgos financieros.
Para que la economía se recupere es fundamental que repunte el mercado inmobiliario, que sigue de capa caída tras más de dos años de restricciones para frenar el sector. Se considera que Pan es más duro con la regulación inmobiliaria, aunque el Politburó del Partido Comunista señaló el lunes un cambio de postura, insinuando una probable relajación de las políticas en los próximos meses.
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