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Según previsiones difundidas por cadena ARD, Alternativa para Alemania se encamina a victoria en Turingia con 30,5% de votos
La coalición gobernante del canciller Olaf Scholz fue castigada en dos elecciones regionales en el este de Alemania el domingo, con partidos populistas de extrema derecha e izquierda ganando aproximadamente la mitad de los votos tanto en Turingia como en Sajonia.
Según las previsiones difundidas el domingo por la cadena pública ARD, Alternativa para Alemania se encamina a la victoria en Turingia con 30,5% de los votos. Se trata del primer triunfo de un partido de extrema derecha en unas elecciones regionales alemanas desde la Segunda Guerra Mundial, aunque es muy poco probable que pueda formar gobierno.
Los tres partidos de la alianza de Scholz (los socialdemócratas, los Verdes y los Demócratas Libres) obtuvieron menos de 15% en cada uno de los dos estados. El FDP no alcanzó el umbral de 5% para entrar en los parlamentos regionales y los Verdes no lo consiguieron en Turingia. El único partido tradicional que obtuvo buenos resultados fue la conservadora CDU, que se prevé que gane en Sajonia y quede segunda en Turingia.
Los resultados suponen otro duro golpe para Scholz y su gobierno, profundamente impopular, y ponen de relieve el riesgo que corren de cara a las próximas elecciones nacionales que se celebrarán dentro de poco más de un año. El panorama parece igualmente desolador para las próximas elecciones estatales que se celebrarán dentro de tres semanas en Brandeburgo, la región que rodea a la capital, Berlín, y donde se encuentra el distrito electoral de Potsdam de Scholz.
Tras meses de disputas sobre las prioridades de gasto, el apoyo nacional a los tres partidos gobernantes ha disminuido a mínimos históricos. El respaldo a la alianza conservadora CDU/CSU ronda 32% (prácticamente el mismo que al SPD, los Verdes y el FDP juntos) y la AfD está en segundo lugar con alrededor de 18%.
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