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El gobierno de Venezuela estará en una posición fuerte para aumentar el gasto y atraer votantes en 2024, tras el alivio de varias sanciones estadounidenses que permitirán que más ingresos petroleros fluyan de manera gradual en las arcas públicas, dijeron analistas.
En octubre, Estados Unidos flexibilizó algunas sanciones petroleras luego de un acuerdo electoral entre el gobierno del presidente Nicolás Maduro y la oposición del país. Washington ha condicionado la extensión del alivio si no se levantan las inhabilitaciones a los opositores y liberan presos políticos y estadounidenses "detenidos injustamente".
Ante la revisión de las sanciones, impuestas en 2019, el gobierno puede garantizarse unos US$1.400 millones adicionales en seis meses, según cálculos de la firma local Síntesis Financiera.
Ese dinero adicional, que llegará gradualmente, será en parte gracias a la reorientación de las exportaciones. Una fuente de la industria petrolera dijo a Reuters que esperan que los ingresos por ventas externas crezcan un 40% al mes.
Bajo las sanciones, la estatal petrolera Pdvsa vendía el petróleo a través de intermediarios poco conocidos, lo que llevó en marzo a la detención por corrupción de varios funcionarios.
"El incremento de los ingresos será gradual", dijo José Vielma, diputado oficialista y miembro de la Comisión de Finanzas del Parlamento. "Ese aporte iría a gasto social y servicios", dijo, sin dar más detalles.
El Ministerio de Comunicación y el partido gobernante, Psuv, no respondieron a solicitudes comentarios.
"Es casi una certeza que el horizonte de mayores ingresos se traduzca en mayor laxitud fiscal (... ante) La necesidad de mejorar el respaldo popular del gobierno de cara a las elecciones del segundo semestre de 2024", agregó la firma Síntesis Financiera.
El Gobierno en años electorales ha disparado el gasto en salarios, distribución de alimentos, proyectos de construcción de viviendas y creación de "misiones", que varias organizaciones no gubernamentales cuestionan como esfuerzos de control social.
Si la flexibilización de la licencia se mantiene durante 2024 y sube la producción de crudo, que hoy promedia los 800.000 barriles por día (bpd), los fondos extraordinarios podrían llegar a un máximo de US$7.000 millones el próximo año, estima la consultora Ecoanalítica.
"En momentos electorales sube el gasto clientelar, y es posible que otorguen bonos a trabajadores y mejoren las frecuencias en la distribución de alimentos, de mensuales a quincenales así como cambios en las misiones", dijo Oswaldo Ramírez, analista político y director ORC Consultores.
"El desafío para el Gobierno es que esa cobertura se convierta en votos (...) El oficialismo ha perdido votos en parte por esos rezagos en los aumentos de salarios y las pensiones", agregó.
El Gobierno este año ya empezó a lanzar nuevas misiones, una para la juventud y otra para la atención, anuncios que no ocurrían desde 2017.
Los programas sociales oficiales han distribuido alimentos, viviendas e incluso bienes como repuestos para motocicletas, teléfonos móviles y tabletas informáticas.
Algunos opositores han cuestionado varios programas al señalar que son una mala respuesta a la destrucción de la economía y han señalado que el gasto en el área social debería estar mejor orientado en salarios y pensiones.
"El gobierno gastará pero no a los niveles de antes", dijo José Guerra, economista y director del no gubernamental Observatorio Venezolano de Finanzas. "Podría haber erogaciones a sectores sociales, pero los ajustes salariales al sector público lucen difícil por los costos", agregó.
Los ingresos adicionales permitirían a Maduro revisar la estrategia de freno de la inflación que se ha basado en menos gasto público, menor crédito y anclaje cambiario, dijeron analistas. La inflación interanual a septiembre fue 317%.
Como parte de medidas ortodoxas, el gasto público ha bajado a 15% del Producto Interno Bruto (PIB), desde un 40% hace una década, según firmas económicas, lo que ha golpeado a empleados del sector público con el atraso en aumentos salariales.
En el sector público, que agrupa a más de 2 millones de trabajadores, los salarios oscilan entre 45 y 60 dólares, mientras en el sector privado supera los US$200, según cálculos del Observatorio Venezolano de Finanzas.
Al haber más fondos petroleros el Banco Central no solo tendrá más divisas para inyectar al mercado cambiario, dijeron analistas, sino también podría crear menos bolívares para cubrir el déficit del sector público, una medida que ha incidido en el alza de precios de durante casi una década. Firmas económicas que este año la inflación seguirá por encima de 250%.
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