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Medida implica toque de queda desde el martes y la suspensión de todas las actividades exceptuando las vinculadas con la salud
El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, decretó el lunes un estado de excepción, lo que implica un toque de queda desde la noche del martes y la suspensión de todas las actividades exceptuando las vinculadas con la salud y el abastecimiento de alimentos para evitar que se expanda el coronavirus en el país.
La medida forma parte de un conjunto de acciones anunciadas por el Gobierno desde la semana pasada como la restricción de ingresos internacionales de personas al país desde el domingo, cierre parcial de frontera terrestre y desde el martes la prohibición parcial de circulación interna.
"He decretado el estado de excepción en el país, por lo cual se cierran los servicios públicos, a excepción de salud, seguridad, servicios de riesgos y aquellos que por emergencia los ministerios decidan mantener abiertos", dijo Moreno en una intervención televisada.
"Desde mañana martes rige toque de queda desde las 9.00 de la noche hasta las 5.00 de la mañana", agregó.
Además a partir del martes a media noche, suspenderá por 14 días el transporte interprovincial, vuelos domésticos y circulación de vehículos particulares, a excepción de los relacionados con la emergencia.
Moreno dijo que los bancos seguirán operando con normalidad, así como las industrias agrícolas, ganaderas y cadenas relacionadas con alimentos, salud, plataformas digitales de entrega a domicilio, medios de telecomunicaciones y toda la cadena de exportaciones.
"Todo el resto de actividades de sectores e industrias tendrán que detenerse".
Ecuador elevó el lunes a 58 casos confirmados desde los 37 que reportó el domingo, de los cuales dos han fallecido por causa del virus, y otras 315 personas se mantienen en cerco epidemiológico, según datos del Servicio de Gestión de Riesgos.
Más temprano, el Gobierno restringió el ingreso de turistas a las Islas Galápagos en un intento por evitar que el coronavirus llegue al archipiélago, considerado uno de los sitios naturales con mayor biodiversidad del planeta.
El vicepresidente Otto Sonnenholzner reconoció el fin de semana que las islas no tenían capacidad sanitaria para atender de manera adecuada casos de coronavirus. El Gobierno no ha confirmado contagios en las islas.
Galápagos recibió a unos 270.000 turistas entre nacionales y extranjeros durante el 2019, según datos oficiales.
En Ecuador están suspendidas las actividades académicas y concentraciones masivas, incluyendo las religiosas desde la semana pasada.
Las medidas del Gobierno han generado confusión en los viajeros y decenas de ecuatorianos han denunciado en redes sociales que se encuentran varados en aeropuertos de otros países.
"Estamos enfrentando una guerra y en esta guerra haré todo lo posible y hasta lo imposible para cuidar a mis hermanos", concluyó Moreno, al pedir a los ecuatorianos quedarse en casa.
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