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El abaratamiento de los préstamos suele beneficiar al metal precioso, ya que no devenga intereses
El oro llegó a un nuevo máximo este miércoles luego de los operadores aumentaron sus apuestas a un recorte de los tipos de interés de la Reserva Federal, al tiempo que sopesaban el incierto panorama político en Estados Unidos.
Ayer, el lingote alcanzó un máximo histórico de US$2.483 la onza, antes de moderar sus ganancias. El oro subió 1,9% el martes, superando el récord alcanzado en mayo, mientras los inversores apostaban por una bajada de los tipos de interés de la Reserva Federal más temprana y más pronunciada, ante los crecientes indicios de que la inflación se está acercando al objetivo del banco central.
El abaratamiento de los préstamos suele beneficiar al metal precioso, ya que no devenga intereses.
La razón principal es que los metales preciosos, como el oro, no generan intereses por sí mismos, a diferencia de otros activos financieros como bonos o cuentas bancarias que sí devengan intereses.
El Gobernador de la Fed, Christopher Waller, dijo el miércoles que la economía se está acercando a un punto en el que el banco central puede reducir los costes de endeudamiento, pero indicó que le gustaría ver un “poco más de evidencia” de que la inflación está en una trayectoria descendente sostenida.
Waller se suma a un creciente coro de funcionarios que han señalado que se están acercando a recortar los tipos, aunque la mayoría -incluido el presidente Jerome Powell- se han abstenido de ofrecer orientación sobre el momento exacto de tal medida.
El oro se disparó 20% este año, apoyado por las grandes compras de los bancos centrales, el fuerte apetito de los consumidores en China y la demanda de activos refugio en medio de las tensiones geopolíticas. Los operadores centrados en el impulso están resurgiendo como motor clave del oro en un entorno más alcista.
“Los fundamentales han cambiado claramente para ofrecer a los inversores mayores razones para volver a ponderar las tenencias de oro en la cartera, y esto ha llevado a los fondos sensibles al precio a perseguir el alza”, dijo Chris Weston, jefe de investigación de Pepperstone Group Ltd. “Con un posicionamiento amplio y un sentimiento que no se acerca a los extremos, los US$2.500 podrían ponerse a prueba muy pronto”, dice el analista.
Sin embargo, hay indicios de que el rally se ha extendido demasiado. El índice de fuerza relativa del oro a 14 días rondaba los 70 puntos, un umbral que algunos inversionistas consideran.
En una entrevista con el Wall Street Journal publicada el miércoles, Williams dijo que el Banco Central aprenderá “mucho” entre julio y septiembre, un mes en el que se espera ampliamente que los responsables de las políticas reduzcan las tasas de interés.
Los comentarios del jefe de la Reserva Federal de Nueva York, junto con los realizados por el presidente Jerome Powell y otros responsables de la política monetaria en los últimos días, sugieren que el Banco Central se está acercando a recortar las tasas, pero aún no está listo para hacerlo. Las lecturas de los últimos meses nos “acercan a la tendencia desinflacionaria”, dijo.
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