El peso mexicano alcanzó un nuevo mínimo de siete años, abajo de 17,30 por dólar

Se mantiene la buena racha para el peso mexicano. La moneda alcanzó un nuevo mínimo de siete años, al cerrar este viernes en niveles de 17.2716 unidades por dólar y anotar una apreciación semanal de 1.6 por ciento.

La moneda mexicana ha mantenido una buena racha durante este 2023, reflejada en una apreciación anual de 11,47% -equivalente a una ganancia de 2,23 pesos-, en niveles similares de hace siete años o el 3 de mayo del 2016.

Además, la moneda quedó a 0,4% de buscar perforar el nivel mínimo de 2016 unidades por dólar, que fue de 17,21 pesos por divisa estadounidense. El tipo de cambio reportó un avance de 1,6% en la semana, convirtiéndola en la tercera sesión positiva consecutiva y la del alza más acelerada de las últimas 10 semanas respecto de su cotización frente a la moneda de Estados Unidos.

La tendencia positiva del tipo de cambio en México la llevó a cerrar con una ganancia de 27,99 centavos ante la divisa estadounidense en la semana del 5 al 9 de junio.

Esta fue la mejor apreciación semanal del peso desde finales de marzo de este año.
Mientras tanto, el viernes, la apreciación de la divisa mexicana fue de 0,69% o de 11,95 centavos. En la sesión se observó un máximo de 17,3907 unidades y un mínimo de 17,2600 pesos por dólar, de acuerdo con los datos del Banco de México.

La apreciación semanal del peso fue resultado de la debilidad del dólar estadounidense de 0,58%, de acuerdo con el índice DXY y por la expectativa de que la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos mantendrá sin cambios la tasa de interés en el anuncio del próximo miércoles 14 de junio, opinó Gabriela Siller, directora de Análisis Económico en Banco Base.

La experta del mercado cambiario dijo que los niveles alcanzados este viernes por el tipo de cambio, por las razones arriba explicadas, abren la posibilidad de llegar este año a cotizaciones cercanas a 17 pesos por dólar, aunque si baja de 17,05, registraría niveles no vistos desde 2015.

Destacó la economista que con la rápida apreciación del peso frente a la divisa estadounidense, los exportadores y los receptores de remesas son los perjudicados, al no poder ajustarse rápidamente a las disminuciones del tipo de cambio y ello “se verá reflejado en una desaceleración del consumo y en un menor crecimiento de las exportaciones mexicanas”.

Puntualizó que en el caso de las remesas, “si el tipo de cambio continúa el resto del año en los niveles actuales, estas perderán 10.60% de su poder adquisitivo respecto al 2022, siendo la mayor caída de la cual se tenga registro. Los mexicanos en Estados Unidos mandan el mismo número de dólares y sus familiares reciben menos pesos.

Durante la semana el peso mexicano se vio apoyado en positivos datos de inflación local (que siguió dando señales de desaceleración), crecimiento de las importaciones estadounidenses y mejora de perspectivas económicas tanto para México como para el mundo para el cierre de 2023 de organismos internacionales (como el Banco Mundial y la Ocde).