El segundo mayor accionista de Toshiba se opone a plan de separación de la empresa

3D Investment Partners Pte, el segundo mayor inversor de Toshiba Corp., convocó a una reunión especial de accionistas de la empresa japonesa el jueves, ya que intensifica la oposición a un plan de separación.

3D, con sede en Singapur, está solicitando una votación sobre la división propuesta por Toshiba que debe ser respaldada por al menos dos tercios de los accionistas, dijo en un comunicado, confirmando un informe anterior de Bloomberg News. Una segunda propuesta de 3D, que tiene una participación de 7,6% en Toshiba, solicita que la empresa reconsidere opciones alternativas.

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Toshiba anunció en noviembre que tenía la intención de separarse en tres compañías como una forma de crear valor para los accionistas después de años de escándalos y problemas de gobierno corporativo. 3D publicó una carta abierta ese mes oponiéndose al plan, diciendo que el proceso de revisión estratégica de Toshiba era inadecuado.

El inversor ahora está convocando una reunión general extraordinaria porque está preocupado por la falta de transparencia en el proceso de separación, incluida la forma en que Toshiba pretende estructurar el voto de los accionistas y qué nivel de apoyo se necesitaría para que el proceso continúe, personas familiarizadas con sus planes decían.

Un representante de Toshiba no estuvo disponible de inmediato para comentar.

Desconfianza de los inversores

La primera propuesta es inusual en el sentido de que requeriría que Toshiba siguiera adelante con la división de la empresa o cualquier otra reorganización estratégica respaldada por la junta y su comité de revisión estratégica, si se aprueba. La medida tiene como objetivo garantizar que al menos dos tercios de los inversores apoyen la ruptura, un umbral que normalmente sería necesario para cualquier reorganización o venta importante de una empresa japonesa.

3D planea votar en contra de su propia propuesta, dijo. La firma de inversión cree que un voto de mayoría absoluta le daría a Toshiba un mandato claro para sus planes si se aprueban, o obligaría a la compañía a desechar la división y lanzar una nueva revisión si no obtiene suficiente aceptación.

La segunda propuesta, que apoyará 3D, pide que el comité de revisión estratégica de la junta de Toshiba lance una nueva revisión para garantizar que se exploren por completo todas las vías para desbloquear el valor.

Toshiba planea completar las escisiones del negocio de servicios de infraestructura y la unidad de dispositivos de tecnología para la segunda mitad del año fiscal 2023, dijo la compañía. 3D argumentó en su carta de noviembre que el proceso de revisión estratégica que condujo al plan de ruptura tenía fallas y no abordó los problemas subyacentes de la compañía.

“No hay razón para creer que la reorganización resolverá los problemas de Toshiba desde hace mucho tiempo”, dijo 3D. "En cambio, simplemente creará tres 'pequeñas Toshibas' con problemas similares".

La firma de inversión ha acusado a Toshiba de no explorar adecuadamente una gama completa de alternativas, incluida la venta de la totalidad o parte de la empresa. También ha argumentado que Toshiba interrumpió prematuramente las conversaciones sobre la venta de una participación minoritaria a una firma global de capital privado a favor de la ruptura.

Escándalo contable

La compañía ha dicho que planea celebrar una junta de accionistas en marzo para votar sobre el plan de separación. El liderazgo de Toshiba ha ofrecido pocos detalles más allá de eso, incluida la fecha en que se llevará a cabo la votación.

El impulso de 3D para su propia reunión y propuestas resalta la tensión latente y el nivel de desconfianza entre el ícono japonés y algunos de sus mayores inversores. Toshiba se ha visto envuelta en una controversia desde el surgimiento de un escándalo contable en 2015 que devastó sus ganancias y condujo a una reestructuración en toda la empresa.

El posterior desenlace de una costosa incursión en el negocio de la energía nuclear en los EE. UU. Lo vio tambalearse al borde de la exclusión de la lista, lo que lo obligó a vender su unidad de memoria de la joya de la corona y ofrecer acciones que fueron compradas por inversionistas activistas. Eso, a su vez, llevó a una pelea por poder en una reunión de accionistas de 2020, donde se descubrió que los ejecutivos de la empresa y los funcionarios de alto nivel se habían coludido para influir en la votación.

El conglomerado con sede en Tokio dijo en noviembre que su ex director ejecutivo Nobuaki Kurumatani violó los estándares éticos cuando él y el equipo directivo trabajaron contra inversores activistas, incluido Effissimo Capital Management Pte, que estaba tratando de obtener más control del conglomerado en su accionista anual de 2020. reunión. Desde entonces, se ha comprometido a mejorar su gobernanza y su relación con los accionistas.