MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
Los inversores extranjeros siguen de cerca la votación ecuatoriana, debido a que los planes de gasto social de Arauz son ambiciosos
Los ecuatorianos votaban en una segunda vuelta presidencial el domingo, tras un duro debate sobre si mantener las políticas de libre mercado de los últimos cuatro años o el regreso al socialismo de la década anterior para reactivar la estancada economía de la nación andina.
El economista de izquierda Andrés Arauz está ofreciendo generosas ayudas económicas en efectivo y una reanudación de las políticas y programas sociales de su mentor, el expresidente Rafael Correa, quien vive en Bélgica y ha sido condenado por la justicia ecuatoriana por un caso de sobornos.
Por su parte, el exbanquero Guillermo Lasso, candidato presidencial por tercera vez, promete impulsar la economía a través de la inversión extranjera para crear miles de empleos, una reducción de impuestos y un amplio plan de estímulos al sector rural y agrícola.
Los inversores extranjeros siguen de cerca la votación ecuatoriana, debido a que los planes de gasto social de Arauz son ambiciosos frente a la delicada situación de las finanzas públicas y una débil economía, que ahondó sus problemas de liquidez por la pandemia del coronavirus.
La decepción de los ecuatorianos con la clase política y el temor al contagio del coronavirus parecen haberse reflejado en una escasa participación.
Apenas el 45% de los sufragantes registrados en el país había emitido su voto hasta la media tarde, dijo la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Diana Atamaint, en una transmisión televisada, instando a los ciudadanos a acudir a las urnas para "dar legitimidad a las próximas autoridades electas".
Los primeros resultados oficiales se esperan la noche del domingo. El nuevo presidente asumirá el cargo el 24 de mayo.
La economía del país petrolero ya estaba débil como resultado de los bajos precios del crudo cuando comenzó el brote de coronavirus. La pandemia ha empujado a un tercio de la población a la pobreza y dejó a casi medio millón de personas en el desempleo.
El presidente Lenín Moreno impuso dolorosas medidas de austeridad como parte de un acuerdo por 6.500 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI), pero no pudo poner en marcha a la economía dolarizada.
Consolidación de la izquierda
Un triunfo de Arauz seguiría a las victorias de la izquierda en países sudamericanos como Argentina y Bolivia.
Arauz, de 36 años, ha ofrecido entregar un bono de emergencia de 1.000 dólares a un millón de familias tan pronto asuma el cargo, reestructurar las deudas a pequeños comerciantes y emprendedores, y dar empleo a los jóvenes.
"Esta es nuestra oportunidad para dejar el pasado atrás, ese dolor, ese sufrimiento y pasar a un gobierno realmente humano", dijo luego de acompañar a sufragar a una comerciante en el sur de Quito. Arauz no está inscrito para votar en el país porque residía en México antes de regresar a Ecuador para postularse.
Lasso, de su parte, ha tratado de suavizar su imagen conservadora prometiendo luchar contra la discriminación por orientación sexual y más protección a la naturaleza.
El exbanquero votó en Guayaquil junto a su familia y dijo que confiaba en que el pueblo le dará una importante victoria.
Los dos postulantes han pedido a sus seguidores que "cuiden los votos" y denuncien irregularidades durante la jornada y el proceso de escrutinio.
El activista indígena Yaku Pérez, quien perdió con un estrecho margen frente a Lasso un puesto en el balotaje, ha pedido a sus seguidores anular la papeleta en protesta por lo que llamó un fraude electoral durante la primera ronda.
"No confío en ninguno de los candidatos, ambos están corrompidos por los partidos políticos de siempre", dijo Mirella Párraga, un ama de casa de 43 años, en un recinto en Guayaquil. "Quiero sentirme tranquila y no entregarle mi voto a quien empeore la situación de este país".
Ecuador en el 2000 dolarizó su economía en medio de una crisis bancaria y una inflación en espiral.
El auge petrolero mundial ayudó a Correa a financiar generosas programas sociales que alimentaron su popularidad y le permitieron permanecer en el cargo por una década hasta el 2017, pero años de abultados préstamos finalmente pusieron presión sobre las finanzas del gobierno.
Moreno, exvicepresidente del gobierno de Correa, se separó rápidamente de las políticas económicas socialistas.
Un tribunal condenó a Correa el año pasado a ocho años de prisión por cargos de sobornos a cambio de contratos públicos. Ha acusado a Moreno de utilizar la justicia para perseguirlo.
El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por su siglas en inglés) deportó a unos 271.000 inmigrantes a 192 países en el año fiscal 2024
El ministro Mishustin le dijo a Putin que las acciones del banco estaban obstaculizando los esfuerzos para apoyar a la economía
Con el aumento de las tasas, las empresas se enfrentan a una carga especialmente dura, ya que tendrán que reestructurar sus planes y mantener sus inversiones