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En Brasil es donde menos trabajo tienen
La calidad del empleo en una nación suele depender de varios factores, ya sea el contexto de crecimiento económico o la proporción y evolución demográfica. Para 2018, según reportes de la Comisión Económica para América Latina (Cepal) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el panorama mejoró gracias a factores como una modesta aceleración de la creación de empleo asalariado y una mayor inserción de las mujeres en el mercado laboral.
En este último caso, el informe de la Cepal y la OIT muestra que las naciones donde las mujeres consiguen más trabajo son México y Ecuador, pues la tasa de desocupación llega solo a 3,4% y 6,9%, respectivamente. Esto en medio de un contexto regional donde aumentaron tanto la tasa de ocupación (0,3 puntos porcentuales) como la de su participación en el mercado laboral (0,2 puntos porcentuales).
Frente a ese tema, el director de la oficina de la Cepal en Bogotá, Juan Carlos Ramírez, subrayó que “esto se debe a la necesidad de los hogares de tener más de un ingreso, que en otros países no se presenta, lo que ha llevado a que la participación de los ciudadanos en el mercado laboral de los países latinoamericanos sea más alta”.
El país donde la tasa de desocupación de las mujeres es superior es en Brasil con 16,7%, seguido de Colombia con 13,7%. El top cinco lo cierran Argentina (10,7%); Uruguay (10,1%); y Perú (8,5%).
El informe de los organismos multilaterales también midió la tasa de actividad de las mujeres en América Latina. Dicha medición tiene en cuenta a la población activa, que recoge a la población ocupada y a la población parada. Colombia tiene la tercera tasa de actividad más alta de la región para las mujeres con 56,9%, mientras que la cuarta está en Brasil con 56,2%.
En el caso de México, es la economía que presenta el porcentaje más bajo en este rubro, con 46,7%, contrario a Paraguay, que con 61,6% cuenta con la cifra más elevada.
Las cifras de la Cepal y la OIT también midieron la tasa de ocupación en la región, que tiene en cuenta al total de habitantes que desempeña alguna labor u empleo, sin tener en cuenta a la población parada o desempleada sobre el total de la población en edad de trabajar. En este campo, Paraguay también es el país que tiene la cifra más alta para las mujeres con 56,2%, mientras que Argentina, con 43,4%, tiene la más baja, superada inmediatamente por México con 45,1%.
En el caso de Colombia, es la cuarta economía donde la tasa de ocupación de las mujeres es más alta con 49,1%, superada por Uruguay (50%), Perú (54,6%) y la ya mencionada Paraguay, creando “un factor positivo para la economía del país” según Ramírez.
“Colombia está en un lugar relativamente alto en la tasa de actividad porque hay una alta participación de la población en la economía del país”.
“Los niveles de informalidad siguen siendo preocupantes y nos llevan a buscar cambios más estructurales a pesar de que la dinámica ha sido positiva en los últimos años”.
La región mantiene la tendencia
Los casos generales de desocupación, actividad y ocupación de los países de América Latina no son muy diferentes al panorama femenino en cada uno de ellos, pues los países que se ubican con las cifras más altas y más bajas son los mismos. En el caso de la desocupación, Brasil (14,7%) y Colombia (11,3%) siguen siendo los más altos, mientras que Ecuador (5,4%) y México (3,5%) los más bajos. Por el lado de actividad y ocupación, Paraguay sigue de líder con 71,7% y 66,4% respectivamente.
Por su parte, Colombia se mantiene como el tercer país con mayor tasa de actividad con 65,1%, mientras que en tasa de ocupación tiene 57,7% y es el quinto de la región.
Ante este panorama, el decano de Economía de la Universidad de Rosario, Carlos Sepúlveda, mencionó que “Colombia lleva un tiempo donde la tasa general de participación ha crecido y se crean más empleos formales. Sin embargo, frente a los países de la región, seguimos teniendo niveles de informalidad y desempleo altos”.
El crecimiento de la región fue menor
Según las proyecciones de la Cepal y la OIT, el crecimiento económico de la región resultó menos dinámico de lo esperado, pues las expectativas bajaron de 2,2% a fines de 2017 a 1,3% en octubre de 2018. Ante ese escenario, se prevé que la tasa de desocupación urbana presente pocos cambios respecto a 2017, ubicándose nuevamente alrededor de 9,3%. En este contexto, las políticas del mercado laboral y de protección social “serán cruciales” para la protección del bienestar de la población.
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