MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
En las anteriores elecciones presidenciales de EE.UU. hubo fallas en medir la intención de voto de los electores, analistas creen que este escenario se puede repetir este año
Queda una semana para las elecciones presidenciales de Estados Unidos, el martes 5 de noviembre los estadounidenses irán a las urnas para elegir entre la alternativa del Partido Demócrata y el Republicano.
Las últimas encuestas, realizadas por Reuters e Ipsos, arrojó que la vicepresidenta Kamala Harris tiene una ventaja marginal de 46% sobre 43% de intención de voto por el expresidente Donald Trump.Pero si el escenario de las anteriores presidenciales se repite, en el que el voto por Trump fue subestimado por las encuestas nacionales, en realidad sería el que llevaría la ventaja y mayor opción de ganar.
Cuando Trump se enfrentó con Joe Biden por gobernar en el actual periodo presidencia, el actual presidente logró 306 votos en el Colegio Electoral de los 270 mínimos para quedarse con la presidencia, de forma que logró 51,38% de los votos. Mientras que Trump alcanzó 232 votos (46,91%), aunque no ganó, el promedio de las encuestadoras previas a la votación apuntaba a que Biden se iba a quedar con 52% de los votos pero Trump solo iba a alcanzar 42%, lo cual reflejó que se exageró el apoyo a Biden en 3,9 puntos porcentuales y se subestimó el apoyo a Trump en cinco puntos porcentuales.
Con este precedente, la duda actual entre los analistas es si los resultados que están arrojando las encuestas, a favor de Harris en varios casos como el de Bloomberg News Morning Consult, son verídicos o hay un subregistro en los votos que llegarán a Trump en la contienda oficial. Si es así, el liderazgo que aparentemente tiene Harris estaría amenazado por contar con una ventaja inferior a la que tenía Biden hacen cuatro año respecto al mismo contrincante.
En la anterior votación se encontró que las encuestadoras fallaron en subestimar la proporción de votantes blancos y de mayor edad que finalmente emitieron su voto y se sobreestimó el apoyo a Biden en las áreas urbanas frente a los resultados reales, por lo que identificó el problema y se eliminaron varios sesgos al elegir la muestra, pero Courtney Kennedy, supervisor de diseño de encuestas y ciencia de datos del Pew Research Center a The Wall Street Journal, “me gustaría poder decir que la industria de las encuestas ha hecho cosas para darnos una gran confianza en que las encuestas no volverán a subestimar sistemáticamente el apoyo a Trump, pero ese no es el caso. Los encuestadores han hecho un gran esfuerzo para corregir el error, pero no hay solución milagrosa”.
Manuel Camilo González, profesor de relaciones internacionales de la Universidad Javeriana, señaló que así las encuestas indiquen una mayor intención de voto de los estadounidenses por un candidato, siempre existirá el riesgo de que quien gane el voto popular no se convierta en el presidente de Estados Unidos al no lograr los 270 delegados necesarios en el Colegio Electoral.
En la historia del país ha sucedido cinco veces, tres veces en el siglo XIX y dos veces en el siglo XXI, una de ellas en las que Donald Trump superó en el colegio electoral a Hillary Clinton pero no en voto popular; este es un escenario que también se puede dar este año, que un candidato gane por votos populares pero no electorales.
“El ritmo que han adoptado últimamente las campañas de Trump y Harris en los estados claves y con más delegados es por esa necesidad de asegurar el número suficiente de electores en cada estado según el número de población. Existe una marcada desigualdad en el peso del voto de un estado a otro”, añadió.
El partido frente amplio encabeza la intención de voto con un promedio de 45,6%
El candidato del opositor Frente Amplio, Yamandú Orsi, se enfrentará al exlegislador Álvaro Delgado, del Partido Nacional de la coalición oficialista de centroderecha
La intermediaria canceló su inscripción definitiva ante la CMF el 15 de octubre. El trader revive los mejores momentos en la rueda