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Tasa de desocupación de los jóvenes de la generación Zen el área Ocde llegó a 38,3%, casi dos veces el índice de desempleo general
Desde el comienzo de la pandemia se han podido coleccionar una serie de efectos negativos que han impactado de frente varios sectores de la economía mundial, entre los que se encuentra el empleo juvenil, particularmente en España, Italia y Colombia.
Si bien la emergencia sanitaria ha dejado sin trabajo a 1.000 millones de personas en el mundo, de acuerdo con información de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), han sido los jóvenes de la generación Z, entre los 15 y 24 años, los más golpeados por la escasez de plazas de trabajo.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (Ocde), en su informe “Perspectivas de empleo de la Ocde”, los jóvenes que nacieron entre 1997 y 2009 en el área de países miembro de la Organización tienen una tasa de desempleo de 18%, que duplica la tasa general y triplica la de adultos entre 24 y 75 años.
Ahora bien, son alarmantes las cifras, toda vez que, según este mismo informe, la generación Z representa 30% de la población mundial total, y se prevé que, para 2025, representará 27% de la fuerza laboral de todo el globo.
Para ejemplificar de manera más precisa la situación del empleo dentro de los jóvenes del mundo, la Ocde presentó una comparativo que deja entrever las enormes brechas de desempleo entre los más jóvenes, generación Z, y los millennial, generación Y y Boomers, que son todos los nacidos antes de 1996 y que suman hasta 75 años de vida.
En primer lugar, apareció dentro del listado España. Allí la tasa de desempleo juvenil fue de 38,3% al cierre de 2020, lo que supone una gran diferencia con el resto de trabajadores, entre los que el desempleo apenas llega a 14%.
Siguió Italia, donde los jóvenes desempleados llegan a 29,1% y, en el tercer lugar, se ubicó Colombia, donde el desempleo entre los más jóvenes registró una tasa de 27,5% frente a 13,9% de los mayores, con una diferencia sustancial de 13,6 puntos porcentuales con respecto al indicador general.
“Los gobiernos tienen que incentivar la contratación de jóvenes a partir de los estímulos. De esa manera se podría nivelar la gran brecha que existe entre trabajadores jóvenes y mayores”.
De la región, Chile entró en el cuarto lugar del listado entre los de mayores tasas de desempleo juvenil, con un registro de 24,8% y una diferencia de 15,2 puntos porcentuales frente al desempleo general, que es de 9,6%.
Frente a este tema Iván Jaramillo, coordinador del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario, dijo que el desempleo juvenil constituye una problemática mundial del sistema laboral, que es producto de la redefinición del estándar de cualificaciones y reposicionamiento de habilidades y competencias.
En ese sentido, el experto anotó que uno de los principales factores que ha profundizado la brecha laboral entre los más jóvenes es la desconexión existente entre el sistema educativo y el mundo laboral que, de acuerdo con Jaramillo, se ha visto aún más afectada debido a los cambios acelerados que se dieron durante el primer año de confinamiento.
Siguiendo con el listado, la Ocde ubicó a Suecia, Portugal y Luxemburgo entre los de mayor diferencia entre el desempleo general, que es en promedio 6%, y el desempleo juvenil, que alcanzó una tasa promedio de 22% durante lo corrido de 2020.
Allí la Ocde explicó que el alto número de jóvenes desempleados en 2020 fue producto del impacto que tuvo la pandemia en la modalidad de contratación para los jóvenes, pues muchos de ellos, que estaban ocupados temporalmente, no recibieron nunca una ampliación o renovación de sus contratos, lo que elevó las tasas de desempleo a niveles que, en esa región, no se veían desde 1978.
En el caso de Canadá y Estados Unidos, la situación fue igual: en los dos países norteamericanos, las cifras de desempleo entre los de la Generación Z fue de 20% y 15,1%, respectivamente.
Por el lado de Canadá, la Ocde, reportó una diferencia de 12,1 puntos porcentuales respecto a la tasa de desempleo general del país que, según la entidad, fueron impulsados por la lentitud en los planes de vacunación y la falta de incentivos para la reapertura comercial.
Aunque la cifra para Estados Unidos es un poco más baja, allí la diferencia con la medición general fue de apenas ocho puntos porcentuales entre la tasa de desocupación de los mayores (7,1%) y la alcanzada por los jóvenes al cierre de 2020.
Por ejemplo, durante lo corrido de 2020, 25% de los jóvenes empleados en Estados Unidos desarrollaban actividades dentro del sector de hotelería, ocio y turismo. Este mismo sector, al cierre del primer año de pandemia, había perdido 41% de empleos y despedido a 17.000 trabajadores en todo el mundo, según indican las cifras del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (Wttc).
Para Jaramillo, experto laboralista, los gobiernos del mundo deben incluir entre sus planes incentivos que den ventajas comparativas a quienes contraten jóvenes capaces de compensar y superar las barreras de acceso al primer empleo.
Dicha barrera, complementó, es producto de la falta de experiencia de los jóvenes y de un sistema que “implementa exceso de pruebas y requisitos” para poder ingresar al mundo laboral.
Finalmente, la Ocde destacó a Japón, con una tasa de desempleo juvenil de 4,2%, y Alemania, con 6,2%, como los países del área que mayores oportunidades generan para los adultos más jóvenes.
Mujeres jóvenes fueron las más perjudicadas por la pandemia
De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la tasa de desempleo en las mujeres, que es de 28,9%, duplica a la de los hombres, de 14,6%. La mayor parte de esas 15,3 millones de mujeres jóvenes tienen dificultades para acceder al mercado laboral, a la capacitación o al estudio debido a ocupaciones no remuneradas en el hogar que se vieron intensificadas luego de que los gobiernos del mundo decretaran medidas de confinamiento y cierre total de los centros educativos durante la pandemia.
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