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Pablo Hernández de Cos
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Asumiría el cargo en julio por un período renovable de cinco años, lo que le convertiría en el segundo español en dirigir el banco
Pablo Hernández de Cos, ex gobernador del Banco de España, está a punto de suceder a Agustín Carstens al frente del Banco de Pagos Internacionales, según personas familiarizadas con el asunto.
El hombre de 53 años puede conseguir el apoyo tácito o directo de funcionarios de Europa, América Latina y Estados Unidos, lo que lo coloca firmemente en camino a obtener la aprobación para el puesto de gerente general, dijeron las personas, que declinaron ser identificadas porque las conversaciones sobre el asunto son privadas.
Si tiene éxito, De Cos asumiría el cargo en julio por un período renovable de hasta cinco años, lo que le convertiría en el segundo español en dirigir el llamado banco de bancos centrales.
Eso cambiaría su púlpito en Madrid, donde presionó al gobierno para la reforma de las pensiones y la consolidación fiscal, por uno en Basilea, donde puede continuar con el papel autopercibido del BIS como un sistema de alerta temprana para la economía global. De Cos y el BIS declinaron hacer comentarios.
Tras la crisis financiera de 2008, la institución impulsó el uso de las denominadas herramientas macroprudenciales para gestionar mejor los ciclos. Este año, sus funcionarios advirtieron a los gobiernos endeudados que son vulnerables a una pérdida repentina de la confianza del mercado .
“En un área como la política de estabilidad financiera, que por su propia naturaleza implica monitorear la acumulación de condiciones que causan crisis,es importante que la comunidad internacional cuente con una institución internacional preparada para desafiar el consenso del mercado y la formulación de políticas”, escribió Andrew Baker, profesor de la Universidad de Sheffield, en un capítulo de un libro sobre el BIS en 2020.
Carstens ha buscado construir un perfil más alto para el BIS que el practicado por Jaime Caruana, otro exjefe del Banco de España que lo dirigió hasta fines de 2017. También ha ampliado su papel de fomento de la cooperación monetaria y financiera global a áreas como la investigación sobre monedas digitales.
Aun así, el BIS, cuya fundación en 1930 lo convierte en la institución financiera internacional más antigua del mundo, sigue siendo cauteloso con respecto a la publicidad, y sus reuniones se realizan estrictamente a puertas cerradas y están sujetas a un juramento de silencio efectivo.
Dada esa naturaleza opaca, las maquinaciones de sus procesos de sucesión permanecen en gran medida ocultas a la vista. Los nombramientos requieren la aprobación del directorio, que está compuesto por los gobernadores de los 63 bancos centrales que lo poseen.
Con trabajos previos que incluyeron tanto la fijación de tasas de interés como la presidencia del Comité de Supervisión Bancaria de Basilea, De Cos aportaría una experiencia amplia y relevante al puesto.
Actualmente es presidente del comité técnico asesor de la Junta Europea de Riesgo Sistémico, un panel creado por la Unión Europea a raíz de la crisis financiera mundial de 2008.
De Cos dirigió el Banco de España durante un mandato no renovable de seis años que duró hasta junio. Tras un paréntesis provocado por conflictos políticos, el ex ministro del Gobierno José Luis Escrivá asumió el cargo en septiembre.
Tanto él como De Cos son ex empleados del Banco Central Europeo, y ambos pueden afirmar con certeza haber construido algunas de las carreras más exitosas de cualquier miembro del personal de la institución con sede en Frankfurt.
La presidenta del BCE, Christine Lagarde, no dudó en elogiarlo en junio, calificándolo de “fantástico jugador de equipo y un hombre de clase”.
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