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Steve Ballmer, antiguo consejero delegado de Microsoft, controla un 4% de la red social Twitter, según ha informado Bloomberg, citando un correo de Ballmer. La participación está valorada en más de 800 millones de dólares. Las acciones de la compañía, que está sufriendo en Bolsa durante los últimos meses las dificultades para captar nuevos usuarios, subían ayer más de 2% a media sesión de Wall Street. En la semana, la empresa se ha revalorizado más de 5%, aunque aún acumula un descenso superior al 40% desde abril, cuando presentó los resultados del primer trimestre.
Twitter lleva dos semanas de fuerte agitación. Primero, el grupo anunció que Jack Dorsey, fundador de la firma y hasta entonces consejero delegado temporal, tomaba las riendas ejecutivas del grupo de manera permanente. Apenas unos días después, la empresa reveló un plan de reestructuración que implicaba el despido de 336 empleados, 8% de la plantilla. Twitter también comunicó entonces una revisión al alza en las estimación de resultados para el ejercicio 2015.
Horas después, la compañía hizo público el nombramiento de Omid Kordestani, exdirectivo de Google, como nuevo presidente ejecutivo. En esa misma jornada, Square, empresa también fundada y dirigida por Dorsey, envió al regulador de los mercados de Estados Unidos (SEC) la documentación para salir a Bolsa.
Además de Ballmer, el príncipe saudí Al Waleed bin Talal también ha reforzado su apuesta en Twitter, donde controla ya 5% del capital.
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