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Afirma que las presiones en las finanzas del país son ahora menos apremiantes que las que tienen otras economías durante la pandemia
El acuerdo al que llegaron los países del G7 sobre el impuesto mínimo global para corporativos multinacionales es un buen contexto para fortalecer la situación fiscal de economías emergentes como México, afirmó el director del Departamento del Hemisferio Occidental en el Fondo Monetario Internacional (FMI), Alejandro Werner Wainfeld.
“Al cristalizar un instrumento importante como puede ser esta tasa mínima y el tema digital, será positivo para México y su eficiencia recaudatoria”, advirtió.
En la última entrevista que concedió a El Economista como funcionario del FMI, argumentó que “dadas las presiones fiscales que vienen para adelante se requiere en México mucho más que una vuelta de tuerca (en los cambios tributarios a proponer) para otorgar solidez estructural a las finanzas públicas”.
A escasas semanas de que cierre su responsabilidad en el FMI como director para la región, programada para el 31 de agosto, sostuvo que las presiones fiscales de México son ahora menos apremiantes que las que tienen otros países que expandieron su carga presupuestal durante el covid-19.
“Pero desde el punto de vista de mediano plazo son presiones que se vienen discutiendo desde hace varios años”.
El funcionario omitió detallar las presiones fiscales a las que se refirió. Sin embargo, en las conclusiones al Artículo IV para México, divulgadas en noviembre del año pasado, el staff de expertos que tiene el organismo para el país precisó que se requiere una reforma fiscal que permita aumentar los ingresos no petroleros mientras se hace un sistema tributario más progresivo.
Lo anterior permitiría revertir la tensión generada por la importante caída de la actividad económica, atender el envejecimiento de la población económicamente activa que también alterará las fuentes de ingresos, y solventar los requerimientos financieros de Petróleos Mexicanos, en ausencia de un cambio en el esquema fiscal y productivo de la petrolera.
En la entrevista realizada en una plataforma de videoconferencia, Werner subrayó que el contexto mundial es un buen momento para reforzar los impuestos de renta corporativa así como para cerrar las lagunas fiscales que existían en las prácticas de las multinacionales que movían utilidades a geografías con menores tasas impositivas.
México en las decisiones mundiales
El ex subsecretario de Hacienda admitió que el papel de México en foros internacionales como el G20 es importante porque permite participar de las grandes decisiones que tienen repercusión interna, como puede ser este impuesto mínimo global o las medidas contra el cambio climático.
“Si México está más presente (en foros internacionales) y tiene capacidad de generar coaliciones (con otros países) puede participar más en la vinculación de intereses económicos internacionales”, consignó.
Resaltó que una política exterior más activa, con mayor presencia ayudará en términos económicos, geopolíticos y diplomáticos “para poner a México en la posición donde merece estar sobre los grandes temas internacionales que van a repercutir en el país”.
Werner Wainfeld explicó que el cargo que ha desempeñado en tres periodos dentro del organismo no requiere una postulación diplomática como la que caracteriza a la presidencia del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Refirió que, seguramente ahora mismo, el FMI, al frente de Kristalina Georgieva, está entrevistando a los candidatos que se postularon en la página del Fondo Monetario para el cargo que Werner dejará a partir del próximo 31 de agosto.
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