Inversión extranjera cayó 35% en la región, el nivel más bajo registrado desde 2005

Uno de los golpes más fuertes para la economía, con la llegada de la pandemia, fue la reducción de la inversión extranjera. La incertidumbre que causó la crisis afectó notoriamente los mercados, por lo que es pertinente evaluar la situación actual, reflejada en el reciente informe de la Cepal, sobre la inversión extranjera directa en la región. Este aseguró que, tras una caída de 40,4% para América del Sur y una reducción de 34,7% para toda la región, esta volvió a niveles de inversión registrados en 2005.

El estudio estima que en 2020 ingresaron a América Latina y el Caribe cerca de US$105.480 millones por concepto de inversión extranjera directa, lo que significó una reducción de US$56.000 millones, pues la cifra registrada en 2019 fue de US$161.480.

Entre los países que se destacaron por una caída pronunciada, Bolivia fue el territorio con la mayor cifra, pues reportó una reducción en la inversión de -406,6%, seguido por Panamá, que tuvo una caída de -140,5% y Honduras que también registró números negativos, cayendo 76,3%.

Respecto al caso colombiano, el informe asegura que en 2019 hubo una entrada de inversión extranjera de US$14.313 y para 2020 se registró una cifra de US$8.100 lo que significó una reducción de -43,3%.

De acuerdo con Mauricio Jaramillo, profesor internacionalista de la Universidad del Rosario, en el país se ha mantenido, desde 1990, un mismo discurso para las políticas de inversión extranjera, pese a que muchos personajes han pasado por la presidencia, además aunque se registró una caída por la pandemia, el país ha logrado subir sus cifras gracias a la migración de empresas de Venezuela.

“Buena parte de la inversión que antes llegaba a Venezuela, se está trasladando a Colombia y otros países, y eso implica un impacto positivo para la economía , pues empresas que estaban radicadas en Venezuela o que habían nacido en ese territorio han comenzado a operar aquí”, agregó.

Entre los países que lograron mejores números, se encuentra Ecuador, que registró un alza en la inversión de 22,1%, seguido por Paraguay que registró un crecimiento de 8,8% y México con 6,6%. Pese a que no hubo más países de la región suramericana con números positivos, el lugar con la menor caída fue Guatemala, que registró una reducción de -6,1%.

Al respecto, Jaramillo aseguró que, pese a que hubo caídas en algunos territorios, el aumento favorable del optimismo político en varios países de la región provocó una ralentización en la reducción de la inversión, una muestra de ello es el escenario favorable Argentino, en el que no se ha dado una fuga masiva de capitales pese a que este tiene un gobierno de izquierda.

El documento destacó que los sectores más afectados con la reducción de la inversión fueron los de manufacturas, que cayeron 37,8% y los de recursos naturales, con -47,9%. Aunque el descenso fue generalizado en toda la región, se estima que Brasil y Colombia fueron los que recibieron una menor inversión en hidrocarburos. En el sector de servicios la mayor baja la tuvo Colombia, producto de la caída en sectores de comercio, restaurantes, transporte, almacenamiento y comunicaciones.

Respecto a las manufacturas, se evidenció una tendencia decreciente más profunda que los demás sectores en la última década, producto del retiro de varias empresas de este sector en la región. Ejemplo de ello fue la fabricante de automóviles Ford, que se instaló en Brasil hace más de 100 años y anunció al inicio de este año el cierre de su planta en ese país, generando una pérdida de más de 5.000 empleos.