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El ataque se suma a las repercusiones de la ofensiva israelí para derrocar a Hamás, considerado grupo terrorista por EE.UU. y la UE
Israel lanzó un ataque aéreo mortal contra lo que dijo era una base de Hamas en un campamento de Gaza para palestinos desplazados, un incidente que probablemente avivará la preocupación internacional sobre la guerra en curso.
Hamás afirmó que 40 personas murieron y 60 más resultaron heridas en el ataque, cifras que Israel cuestionó sin proporcionar un saldo alternativo.
Las Fuerzas de Defensa de Israel dijeron que el ataque nocturno estaba dirigido contra combatientes de alto rango de Hamás que operaban un centro de comando y control en la zona humanitaria cerca de la ciudad de Khan Younis, según un comunicado publicado el martes. El ejército dijo que entre los atacados se encontraban tres personas directamente involucradas en la invasión del 7 de octubre.
Hamás negó que hubiera combatientes en la zona, donde cientos de miles de habitantes de Gaza se han refugiado desde que Israel la designó zona humanitaria al comienzo del conflicto.
El ataque se suma a las repercusiones de la ofensiva israelí, que ya lleva casi un año, para derrocar a Hamás, considerado un grupo terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea. Los israelíes han sido acusados de crímenes de guerra, algo que rechazan, durante una campaña que ha dejado gran parte de Gaza en escombros y ha trastocado la vida de los más de dos millones de habitantes de la zona.
A menos de dos meses de unas elecciones presidenciales en las que la crisis de Gaza ha sido un tema divisivo, Estados Unidos supervisa los esfuerzos, con la mediación de Qatar y Egipto, para lograr un alto el fuego.
Esas conversaciones llevan varios meses estancadas en cuestiones como la presencia militar de Israel en la zona fronteriza entre Gaza y Egipto y la composición de un intercambio de rehenes israelíes en poder de Hamás por prisioneros palestinos.
Según las autoridades sanitarias de la Franja de Gaza, controlada por Hamás, hasta la fecha han muerto unos 41.000 palestinos en la guerra. Los combatientes del grupo respaldado por Irán mataron a unas 1.200 personas y secuestraron a 250 durante la invasión del sur de Israel del siete de octubre que desencadenó el conflicto.
Imágenes no verificadas en las redes sociales muestran a los residentes excavando arena y sacando cadáveres en Mawasi, una franja de campos y dunas donde se encontraba el campamento. Un testigo dijo que los ataques dejaron tres cráteres y destruyeron más de 20 tiendas de campaña.
Las FDI afirmaron que se habían tomado numerosas medidas para mitigar los riesgos para los civiles antes de los ataques, incluido el uso de municiones de precisión y vigilancia aérea. Israel había dicho anteriormente que se abstendría de atacar Mawasi a menos que combatientes palestinos operaran allí.
“A pesar de las amplias medidas adoptadas por las FDI para permitir que la población de Gaza se aleje de las zonas de combate, incluida la designación de una Zona Humanitaria, la organización terrorista Hamás continúa implantando sus operativos e infraestructura militar” en esos lugares, dijeron las FDI.
En julio, unos 90 palestinos desplazados murieron en un ataque en Mawasi. Israel afirmó entonces que el objetivo del ataque era Mohammed Deif, un alto comandante de Hamás, y que este había sido el responsable de su muerte.
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