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Estados Unidos y Rusia lideran los llamamientos internacionales para que se haga una pausa en los combates entre Israel y Hamás
El ejército israelí intensificó sus bombardeos sobre el sur de Gaza durante la noche, tras uno de los días más mortíferos para los palestinos desde que comenzó el conflicto, mientras numerosos dirigentes mundiales pedían el cese de los combates para permitir la entrada de ayuda en el enclave asediado.
En un contexto de temor a que el conflicto entre Israel y Hamás se extienda por Oriente Medio, el ejército israelí dijo que sus aviones habían atacado infraestructuras del ejército sirio y lanzadores de mortero en respuesta a los cohetes lanzados desde Siria, aliada de Irán.
El ejército no dio más detalles. No acusó al ejército sirio de disparar los dos cohetes, que hicieron sonar las sirenas antiaéreas en los Altos del Golán, ocupados por Israel.
La agencia de noticias estatal siria (SANA) dijo, basándose en una fuente militar, que el ataque israelí mató a ocho soldados e hirió a siete más en una "agresión aérea" cerca de la ciudad suroccidental de Deraa.
Estados Unidos y Rusia lideran los llamamientos internacionales para que se haga una pausa en los combates entre Israel y Hamás que permita la entrada de ayuda en Gaza, donde los palestinos viven en condiciones angustiosas.
Un total de 704 palestinos, entre ellos 305 niños, murieron el martes, dijo el Ministerio de Sanidad de Gaza, gobernada por Hamás. Según la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU, esta cifra es la más alta registrada en un solo día desde que comenzó el conflicto hace casi tres semanas.
Israel lanzó los ataques contra Gaza después de que militantes de Hamás atacaran ciudades del sur de Israel el 7 de octubre en un ataque en el que murieron 1.400 personas, la mayoría civiles.
El presidente estadounidense, Joe Biden, y el príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salman, hablaron por teléfono el martes y acordaron intensificar los esfuerzos de la diplomacia "para mantener la estabilidad en toda la región y evitar que el conflicto se expanda", dijo la Casa Blanca.
Los enfrentamientos mortales se han intensificado entre el ejército israelí y los palestinos en el territorio bajo ocupación israelí de Cisjordania y resurgieron entre Israel y el grupo armado libanés Hezbolá a lo largo de la frontera entre Israel y Líbano.
Irán, que lleva décadas buscando el predominio regional, respalda tanto a Hezbolá como a Hamás y ha advertido a Israel de que detenga su ofensiva contra Gaza.
Fuerzas israelíes que realizaban una incursión nocturna en Cisjordania ocupada fueron atacadas por un grupo de palestinos a los que el ejército alcanzó con un dron, según el ejército israelí. Las autoridades palestinas dijeron que murieron tres personas.
Desde el 7 de octubre, más de 100 palestinos han muerto en enfrentamientos con el ejército israelí en Cisjordania, según el Ministerio de Sanidad palestino.
El ejército israelí dijo también que había atacado a una célula de buzos de Hamás que intentaban entrar en Israel por mar cerca del kibutz Zikim. Hamás no hizo comentarios inmediatos sobre el incidente.
Estados Unidos ha aconsejado a Israel que no lleve a cabo un asalto terrestre mientras Washington intenta liberar a más de 200 rehenes que Hamás mantiene cautivos en Gaza.
Sin embargo, cuando se le preguntó si estaba instando a Israel a retrasar su invasión terrestre, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo a los periodistas: "Los israelíes están tomando sus propias decisiones".
En un comunicado difundido en redes sociales, el Ministerio de Sanidad palestino en Gaza, gobernada por Hamás, dijo que al menos 5.791 palestinos habían muerto por los bombardeos israelíes sobre el enclave desde el 7 de octubre, entre ellos 2.360 niños.
A última hora del martes, ocho camiones con agua, alimentos y medicinas entraron en Gaza procedentes de Egipto. Las agencias de la ONU dijeron que se necesitaban más de 20 veces las entregas actuales para los 2,3 millones de habitantes de la estrecha franja costera.
En las Naciones Unidas, Estados Unidos y Rusia presentaron planes rivales sobre la ayuda humanitaria a los civiles palestinos. Washington ha pedido una pausa en los combates y Rusia un alto el fuego humanitario. Una pausa suele considerarse menos formal y más breve que un alto el fuego.
"El mundo entero espera que el Consejo de Seguridad pida un alto el fuego rápido e incondicional", dijo ante el Consejo de Seguridad el embajador ruso ante la ONU, Vassily Nebenzia. Los Estados árabes respaldan firmemente el llamamiento a un alto el fuego humanitario en un contexto de destrucción generalizada en Gaza.
El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, también pidió la semana pasada un alto el fuego humanitario inmediato en Gaza.
"Aunque seguimos oponiéndonos a un alto el fuego, creemos que merece la pena considerar pausas humanitarias vinculadas a la entrega de ayuda que sigan permitiendo a Israel llevar a cabo operaciones militares para defenderse", dijo un alto cargo estadounidense.
Los médicos de Gaza afirman que los pacientes que llegan a los hospitales muestran señales de enfermedades causadas por el hacinamiento y las deficiencias sanitarias, después de que más de 1,4 millones de personas huyeran de sus hogares en el enclave para refugiarse en albergues temporales.
La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU dijo que más de un tercio de los hospitales de Gaza y casi dos tercios de las clínicas de atención primaria de salud habían cerrado debido a los daños o la falta de combustible.
La Unrwa, la agencia de la ONU para los refugiados palestinos, advirtió en un mensaje en la red social X que detendría sus operaciones en Gaza el miércoles por la noche debido a la falta de combustible.
Sin embargo, el ejército israelí reafirmó el martes que prohibiría la entrada de combustible para evitar que Hamás se apoderara de él.
Mediadores cataríes están instando a Hamás a que acelere el ritmo de liberación de rehenes para incluir a mujeres y niños y a que lo haga sin esperar concesiones israelíes, dijeron tres diplomáticos y una fuente de la región familiarizada con las conversaciones.
El país del golfo Pérsico, en coordinación con Estados Unidos, dirige las conversaciones de mediación con Hamás e Israel sobre la liberación de rehenes.
Hamás ha liberado hasta ahora a cuatro rehenes: una madre y su hija con doble nacionalidad estadounidense e israelí el viernes y dos mujeres civiles israelíes el lunes.
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