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Funcionarios israelíes han dicho que evalúan el progreso de la campaña militar en la Franja de Gaza, que deja más de 200 muertos
La administración Biden y los gobiernos de Oriente Medio están aumentando la presión sobre Israel para que deje de luchar con el grupo militante Hamas, mientras los funcionarios israelíes evalúan el progreso de una campaña militar de 10 días en la Franja de Gaza.
Hasta ahora, Biden no ha llegado a pedir un alto el fuego inmediato, pero el miércoles le dijo al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en una llamada telefónica que “esperaba una reducción significativa hoy en el camino hacia un alto el fuego”, dijo la Casa Blanca.
Fue la cuarta llamada del presidente de Estados Unidos con Netanyahu durante la semana pasada, dijo la Casa Blanca.
Israel se ha resistido a los llamamientos internacionales para detener los combates, pero ha dado señales de apertura a medida que avanza en su lista de objetivos que actualizó a principios de este año en preparación para un conflicto con Hamas. El primer ministro Netanyahu dijo el miércoles que Israel busca un alto el fuego según sus objetivos militares.
“No queremos solo un final táctico. Queremos garantizar la seguridad continua, durante el mayor tiempo posible, de nuestros ciudadanos”, dijo en una reunión a puerta cerrada de 70 embajadores, según una persona en la sala.
Estados Unidos ha comunicado una demanda a través de intermediarios a Hamas, que considera un grupo terrorista, para que deje de lanzar cohetes de inmediato. Los funcionarios estadounidenses consideran a Egipto como el más importante de al menos dos canales indirectos hacia Hamas. Washington también está trabajando con Qatar, donde se encuentran algunos altos líderes de Hamas, pero se considera que Doha tiene menos influencia sobre Hamas que El Cairo, dijo una persona familiarizada con las conversaciones.
Egipto, cuyo gobierno liderado por militares se opone al islam político en toda la región, mantiene una relación con el movimiento islamista Hamas. El Cairo envió ayuda humanitaria a Gaza, enviando una flota de ambulancias y suministros médicos a la Franja a principios de esta semana y abriendo el cruce fronterizo de Rafah para que los palestinos heridos puedan ser tratados dentro de Egipto.
El pasado martes se comprometió a asignar US$500 millones para los esfuerzos de reconstrucción en la Franja de Gaza.
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