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El presidente electo, José Raúl Mulina, deberá enfrentar la baja calificación crediticia, el bajo nivel del agua y la migración del Darién
José Raúl Mulino, abogado y político, ganó las elecciones presidenciales en Panamá para el periodo que comienza desde el primero de julio de este año hasta el 30 de junio de 2029. El nuevo presidente se incorporó a la carrera electoral como reemplazo del expresidente Ricardo Martinelli, y en cuanto entró, las encuestas Gallup, Doxa Panamá y La Prensa demostraron su popularidad para intención de voto entre 26% y 37%.
Mulino, de 64 años, logró capitalizar el apoyo de Martinelli con el partido Realizando Metas. Tras la validación de su candidatura por la Corte de Panamá, el valor de los bonos panameños aumentó 2,8 centavos por US$1. Este apoyo deberá trasladarse al Congreso para la implementación de la agenda de reformas.
El mandatario electo ocupó varios cargos en el servicio público. Fue viceministro de Asuntos Exteriores en la década de 1990 y ministro del Interior y de Seguridad durante el gobierno de Martinelli, entre 2009-2014.
A principios de siglo, Panamá tenía el Producto Interno Bruto más alto de América Latina, solo después de Uruguay, duplicando incluso al de Colombia, con US$15.388. Sin embargo, uno de los retos de Mulino será mejorar la calificación de Panamá ante Fitch Ratings, que la redujo a grado especulativo en marzo, debido al elevado déficit presupuestario y la pérdida de ingresos procedentes del cobre. S&P y Moody’s mantienen la calificación un escalón por encima de la categoría de “basura”.
Además, deberá abordar la desaceleración del crecimiento, los bajos niveles de agua en el canal de Panamá y el cierre de una de las mayores minas de cobre del mundo, First Quantum, que representa el 5% del PIB nacional y era una importante fuente de ingresos fiscales y exportaciones. La reapertura de la mina, valorada en US$10.000 millones, será vital para mantener el apoyo de los inversionistas.
Fernando Losada, director general de Oppenheimer & Co. en Nueva York, señala que el escenario sigue siendo desafiante para implementar las reformas necesarias. Mulino deberá asumir debates de reforma fiscal y pensional, incluyendo la reapertura de la mina.
El Fondo Monetario Internacional prevé que el país crezca un 2,5% este año, por tal motivo, el economista local, René Quevedo, sugiere que Mulino deberá dar un vuelco a la economía. De hecho, Mulino afirmó que revitalizará el crecimiento económico con inversiones en puertos y carreteras, al tiempo que restablecerá el “orden fiscal”.
La plataforma de Mulino se centra en “llevar más dinero a los bolsillos de los panameños”. Propone una serie de proyectos de infraestructura destinados a impulsar el empleo y la inversión.
Por otro lado, otro de los desafíos radica en la migración, especialmente la del Darién, que ha sumado más de medio millón de migrantes, en su mayoría venezolanos, que esperan llegar a Estados Unidos.
José Raúl Mulino tiene una línea de propuestas marcada por la recuperación económica, desarrollar infraestructura para la rehabilitación de carreteras y fortalecer el alcance de la energía eléctrica. Aquí están sus principales propuestas.
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