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La empresa está golpeada financieramente por casos de corrupción que han remecido el continente
La constructora brasileña Odebrecht SA presentó un recurso de arbitraje contra el gobierno peruano, aduciendo que necesita recuperar los gastos de una inversión fallida por más de 2.000 millones de dólares para pagar a sus acreedores.
La empresa, que anunció la demanda este miércoles, está golpeada financieramente por casos de corrupción que han remecido el continente, y el año pasado comenzó un proceso de reestructuración financiera.
Odebrecht llegó a ser la principal contratista del gobierno peruano, llevando a cabo muchos de los más grandes proyectos de ingeniería en el país.
Sin embargo, su influencia se logró en parte a través de una larga de lista de sobornos pagados a funcionarios públicos, que la misma empresa ha admitido que realizó. Odebrecht está cooperando con la fiscalía peruana.
El arbitraje trata sobre un proyecto de gas conocido como el gasoducto sur peruano, en el que Odebrecht participó. Perú canceló el contrato con Odebrecht en 2017, en un momento en el que el rechazo político hacia la empresa estaba en un punto particularmente alto.
En una carta presentada a la fiscalía, que Reuters pudo revisar, la empresa dice que la cancelación de su participación en el gasoducto "fue un golpe muy fuerte" y que la situación financiera actual de la empresa la obliga a "intentar recuperar" los gastos ya invertidos.
En un comunicado a la prensa presentado el miércoles, Odebrecht dijo que se encuentra "totalmente dispuesta a encontrar juntamente con las entidades competentes del Estado una solución que permita suspender el proceso arbitral".
La fiscalía peruana no retornó un pedido de comentario.
Durante la audiencia de este martes, los abogados de la firma hicieron importantes anuncios con respecto al futuro de la empresa
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Los funcionarios del Departamento de Justicia están dispuestos a impugnar el acuerdo si es necesario y han hecho saber a la empresa sus inquietudes