La Fed prevé tasas de interés sobre 5,1% para el otro año ante panorama económico

La Reserva Federal redujo su rápido ritmo de aumento de las tasas de interés al tiempo que señaló que los costos de los préstamos, ahora los más altos desde 2007, superarán las expectativas de los inversionistas mientras el banco central trabaja para controlar la inflación.

El Comité Federal de Mercado Abierto elevó su tasa de referencia en 50 puntos básicos a un rango objetivo de 4,25% a 4,5%. Los formuladores de políticas proyectaron que las tasas terminarían el próximo año en 5,1%, según su pronóstico medio, antes de reducirse a 4,1% en 2024, un nivel más alto que el indicado anteriormente.

“El comité anticipa que los aumentos continuos en el rango objetivo serán apropiados para lograr una postura de política monetaria que sea lo suficientemente restrictiva para devolver la inflación al 2% con el tiempo”, dijo el FOMC en su declaración, repitiendo el lenguaje que ha usado en comunicaciones anteriores.

Tras las proyecciones de línea dura, los rendimientos del Tesoro aumentaron, el índice S&P 500 cayó y el índice del dólar redujo las pérdidas del día.

Los inversores habían especulado que la Fed pronto detendría sus alzas después de que las condiciones financieras mejoraran. Hasta el miércoles, las acciones habían subido, mientras que las tasas hipotecarias y el dólar habían caído desde que Powell sugirió el mes pasado que se avecinaba un cambio de política. También apostarían a que las tasas alcanzarían alrededor del 4,8% en mayo, seguidas de recortes por un total de 50 puntos básicos en la segunda mitad del año.

El presidente de la Fed, Jerome Powell, quien da una conferencia de prensa a las 2:30 p. m. en Washington, señaló previamente planes para moderar las alzas, al tiempo que enfatizó que el ritmo de ajuste es menos significativo que el pico y la duración de las tasas en un nivel alto.

La decisión sigue a cuatro aumentos consecutivos de 75 puntos básicos que han impulsado las tasas al ritmo más rápido desde que Paul Volcker dirigió el banco central en la década de 1980.

Los aumentos de precios al consumidor han comenzado una desaceleración más pronunciada desde su máximo de 40 años a principios de este año. Pero un creciente grupo de economistas espera que la acción agresiva de la Fed lleve a Estados Unidos a la recesión el próximo año.

Tales preocupaciones han generado críticas de los legisladores, con los senadores demócratas Elizabeth Warren, Bernie Sanders y Sheldon Whitehouse advirtiendo que los aumentos de tasas corren el riesgo de “desacelerar la economía a paso de tortuga”.

Los funcionarios dieron una señal más clara de que esperan que las tasas más altas afecten la economía. Recortaron sus pronósticos de crecimiento para 2023 y vieron una expansión del 0,5%, según las proyecciones medianas publicadas el miércoles. Elevaron su estimación para el PIB de 2022 ligeramente al 0,5%. Los banqueros centrales aumentaron su proyección para la tasa de desempleo el próximo año a 4,6% desde su nivel de 3,7% en noviembre.

La distribución de los pronósticos de tasas también se inclinó hacia arriba, con siete de los 19 funcionarios viendo tasas por encima del 5,25% el próximo año.

Los funcionarios de la Fed elevaron sus estimaciones para las lecturas principal y central de su indicador de inflación preferido, el índice de gastos de consumo personal. Ahora ven el PCE en 3,1% en 2023 en comparación con una estimación de septiembre de 2,8%, mientras que el núcleo, que excluye alimentos y energía, puede ser de 3,5% para el próximo año.

El movimiento del miércoles culmina un año desafiante para el banco central de EE. UU., que inicialmente tardó en comenzar a endurecer la política en respuesta a las crecientes presiones de los precios.

Desde que elevó las tasas desde casi cero en marzo, la Fed se ha movido agresivamente para ponerse al día, al tiempo que mantiene la esperanza de que puede lograr un aterrizaje suave que evite un aumento dramático en el desempleo.

Los funcionarios están tratando de desacelerar el crecimiento por debajo de su tendencia a largo plazo para enfriar el mercado laboral, con ofertas de trabajo aún muy por encima de la cantidad de estadounidenses desempleados, y reducir la presión sobre los precios que están muy por encima de su objetivo del 2%.

Los formuladores de políticas recibieron buenas noticias el martes cuando los datos del gobierno mostraron que los precios al consumidor aumentaron un 7,1% en el año que finalizó en noviembre, la tasa más baja de este año.

Aun así, Powell ha dicho repetidamente que está dispuesto a que la economía sufra un poco de dolor para reducir la inflación y evitar los errores de la década de 1970 cuando la Fed relajó prematuramente la política monetaria.